Nueva Biblia Latinoamericana
Cuando Jeremías terminó de decir todo lo que el SEÑOR le había mandado que hablara a todo el pueblo, lo apresaron los sacerdotes, los profetas y todo el pueblo, diciendo: "De cierto, morirás. (Jeremías 26:8)
¿Por qué has profetizado en nombre del SEÑOR, diciendo: 'Esta casa será como Silo y esta ciudad quedará desolada sin habitante alguno?'" Y todo el pueblo se congregó contra Jeremías en la casa del SEÑOR. (Jeremías 26:9)
Cuando los jefes de Judá oyeron estas cosas, subieron de la casa del rey a la casa del SEÑOR, y se sentaron a la entrada de la Puerta Nueva de la casa del SEÑOR. (Jeremías 26:10)
Entonces los sacerdotes y los profetas hablaron a los jefes y a todo el pueblo, y les dijeron: "¡Sentencia de muerte para este hombre!, porque ha profetizado contra esta ciudad, como han oído con sus propios oídos."
Entonces Jeremías habló a todos los jefes y a todo el pueblo, y les dijo: "El SEÑOR me ha enviado a profetizar contra esta casa y contra esta ciudad todas las palabras que han oído. (Jeremías 26:12)
Ahora bien, enmienden sus caminos y sus obras, y obedezcan al SEÑOR su Dios, y el SEÑOR se arrepentirá del mal que ha pronunciado contra ustedes. (Jeremías 26:13)
En cuanto a mí, estoy en sus manos; hagan de mí como mejor y más recto sea a sus ojos. (Jeremías 26:14)

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Jeremías 26:11 - Referencia Cruzada

Pero Tú, oh SEÑOR, conoces Todos sus planes de muerte contra mí. No perdones su iniquidad Ni borres de Tu vista su pecado. Que sean derribados delante de Ti; En el tiempo de Tu ira actúa contra ellos. (Jeremías 18:23)
Pero para no molestarle más, le suplico que, con su habitual bondad, nos conceda una breve audiencia. (Hechos 24:4)
Toda la asamblea de ellos se levantó, y llevaron a Jesús ante Pilato. (Lucas 23:1)
Ellos respondieron: "Si este hombre no fuera malhechor, no se Lo hubiéramos entregado." (Juan 18:30)
¿Qué les parece?" "¡El es digno de muerte!" le contestaron. (Mateo 26:66)
Entonces, en secreto persuadieron a algunos hombres para que dijeran: "Le hemos oído hablar palabras blasfemas contra Moisés y contra Dios." (Hechos 6:11)
Y los principales sacerdotes y los Judíos más influyentes le presentaron acusaciones contra Pablo, e insistían con Festo, (Hechos 25:2)
Los Judíos le respondieron: "Nosotros tenemos una ley, y según esa ley El debe morir, porque pretendió ser el Hijo de Dios." (Juan 19:7)
Entonces dijeron los oficiales al rey: "Den muerte ahora a este hombre, porque él desanima a los hombres de guerra que quedan en esta ciudad y a todo el pueblo diciéndoles tales palabras. Este hombre no busca el bien de este pueblo, sino el mal." (Jeremías 38:4)
Pero el profeta que hable con orgullo en Mi nombre una palabra que Yo no le haya mandado hablar, o que hable en el nombre de otros dioses, ese profeta morirá.' (Deuteronomio 18:20)
La multitud lo oyó hasta que dijo esto, entonces alzaron sus voces y dijeron: "¡Quita de la tierra a ese hombre! No se le debe permitir que viva." (Hechos 22:22)