Nueva Biblia Latinoamericana
El bueno alcanzará el favor del SEÑOR, Pero El condenará al hombre de malos designios. (Proverbios 12:2)
El hombre no se afianzará por medio de la impiedad, Y la raíz de los justos no será removida. (Proverbios 12:3)
La mujer virtuosa es corona de su marido, Pero la que lo avergüenza es como podredumbre en sus huesos. (Proverbios 12:4)
Los pensamientos de los justos son rectos, Los consejos de los impíos, engañosos.
Las palabras de los impíos son asechanzas sangrientas, Pero a los rectos su boca los librará. (Proverbios 12:6)
Los impíos son derribados y ya no existen, Pero la casa de los justos permanecerá. (Proverbios 12:7)
El hombre será alabado conforme a su discernimiento, Pero el perverso de corazón será despreciado. (Proverbios 12:8)

Otras publicaciones relacionadas con "Proverbios 12:5":

Charles Spurgeon
Los hombres perversos no ocasionarán nuestra caída
Consejos para mantenerse firme ante hombres malvados y engañosos. Confía en Dios y Él te protegerá.


Charles Spurgeon
Personas favorecidas
En este artículo, Charles Spurgeon reflexiona sobre la importancia de tener un corazón recto para poder disfrutar del favor de Dios y la comunión con Él. El salmista anhela vivir en la presencia de Dios y bendecir siempre su nombre, incluso en momentos difíciles. Spurgeon nos invita a buscar la rectitud y la integridad en todas las cosas para poder disfrutar de la presencia y el favor de Dios.


Proverbios 12:5 - Referencia Cruzada

Meditaré en Tus preceptos, Y consideraré Tus caminos. (Salmos 119:15)
Falsedad habla cada uno a su prójimo; Hablan con labios lisonjeros y con doblez de corazón. (Salmos 12:2)
El tramar necedad es pecado, Y el insolente es abominación a los hombres. (Proverbios 24:9)
Escudríñame, oh Dios, y conoce mi corazón; Pruébame y conoce mis inquietudes. (Salmos 139:23)
El deseo de los justos es sólo el bien, Pero la esperanza de los malvados es la ira. (Proverbios 11:23)
Abandone el impío su camino, Y el hombre malvado sus pensamientos, Y vuélvase al SEÑOR, Que tendrá de él compasión, Al Dios nuestro, Que será amplio en perdonar. (Isaías 55:7)
Porque en sus propios ojos la transgresión le engaña En cuanto a descubrir su iniquidad y aborrecerla. (Salmos 36:2)
Y si alguien viene a verme, habla falsedades; Su corazón recoge iniquidad para sí; Cuando sale fuera, lo publica. (Salmos 41:6)
Lava de maldad tu corazón, Jerusalén, Para que seas salvada. ¿Hasta cuándo morarán dentro de ti Pensamientos perversos? (Jeremías 4:14)
Para el director del coro. Salmo de David. Líbrame, oh SEÑOR, de los hombres malignos; Guárdame de los hombres violentos, (Salmos 140:1)
y con engaño, tramaron entre ellos prender y matar a Jesús. (Mateo 26:4)
Herodes (el Grande), al verse burlado por los sabios (magos), se enfureció en gran manera, y mandó matar a todos los niños que había en Belén y en todos sus alrededores, de dos años para abajo, según el tiempo que había averiguado de los sabios (magos). (Mateo 2:16)
Por tanto, no juzguen antes de tiempo, sino esperen hasta que el Señor venga, el cual sacará a la luz las cosas ocultas en las tinieblas y también pondrá de manifiesto los designios de los corazones. Entonces cada uno recibirá de parte de Dios la alabanza que le corresponda. (1 Corintios 4:5)
Cuando lo oyó el rey Herodes (el Grande), se turbó, y toda Jerusalén con él. (Mateo 2:3)
Más bien hemos renunciado a lo oculto y vergonzoso, no andando con astucia, ni adulterando la palabra de Dios, sino que, mediante la manifestación de la verdad, nos recomendamos a la conciencia de todo hombre en la presencia de Dios. (2 Corintios 4:2)