Nueva Biblia Latinoamericana
Echa sobre el SEÑOR tu carga, y El te sustentará; El nunca permitirá que el justo sea sacudido. (Salmos 55:22)
Pero Tú, oh Dios, harás caer a los malvados en el pozo de la destrucción; Los hombres sanguinarios y engañadores no vivirán la mitad de sus días; Pero yo en Ti confiaré. (Salmos 55:23)
Para el director del coro; según la tonada de "La Paloma Silenciosa de los que Están Lejos." Mictam de David cuando los Filisteos lo prendieron en Gat. Ten piedad de mí, oh Dios, porque el hombre me ha pisoteado; Me oprime combatiéndome todo el día. (Salmos 56:1)
Mis enemigos me han pisoteado todo el día, Porque muchos son los que con soberbia pelean contra mí.
El día en que temo, Yo en Ti confío. (Salmos 56:3)
En Dios, cuya palabra alabo, En Dios he confiado, no temeré. ¿Qué puede hacerme el hombre? (Salmos 56:4)
Todo el día pervierten mis palabras; Todos sus pensamientos contra mí son para mal. (Salmos 56:5)

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Salmos 56:2 - Referencia Cruzada

¿Con qué me presentaré al SEÑOR Y me postraré ante el Dios de lo alto? ¿Me presentaré delante de El con holocaustos, Con becerros de un año? (Miqueas 6:6)
Salmo de David. Combate, oh SEÑOR, a los que me combaten; Ataca a los que me atacan. (Salmos 35:1)
Más que el fragor de muchas aguas, Más que las poderosas olas del mar, Es poderoso el SEÑOR en las alturas. (Salmos 93:4)
El que habita al amparo del Altísimo Morará a la sombra del Omnipotente. (Salmos 91:1)
Pues son espíritus de demonios que hacen señales, los cuales van a los reyes de todo el mundo, a reunirlos para la batalla del gran día del Dios Todopoderoso. (Apocalipsis 16:14)
En Ti me alegraré y me regocijaré; Cantaré alabanzas a Tu nombre, oh Altísimo. (Salmos 9:2)
El devolverá el mal a mis enemigos; Destrúyelos por Tu fidelidad. (Salmos 54:5)
Salmo. Cántico para el día de reposo. Bueno es dar gracias al SEÑOR, Y cantar alabanzas a Tu nombre, oh Altísimo; (Salmos 92:1)
El enviará desde los cielos y me salvará; El reprocha al que me pisotea. (Selah) Dios enviará Su misericordia y Su verdad. (Salmos 57:3)
Todas las naciones me rodearon; En el nombre del SEÑOR ciertamente las destruí. (Salmos 118:10)
Oh rey, el Dios Altísimo concedió a tu padre Nabucodonosor soberanía (el reino), grandeza, gloria y majestad. (Daniel 5:18)
el que por el Espíritu Santo, por boca de nuestro padre David, Tu siervo, dijiste: '¿POR QUE SE ENFURECIERON LOS GENTILES (LAS NACIONES), Y LOS PUEBLOS TRAMARON COSAS VANAS? (Hechos 4:25)
Salmo de David, cuando huía de su hijo Absalón. ¡Oh SEÑOR, cómo se han multiplicado mis adversarios! Muchos se levantan contra mí. (Salmos 3:1)
Pero Tú, oh SEÑOR, excelso eres eternamente. (Salmos 92:8)
Porque así dice el Alto y Sublime Que vive para siempre, cuyo nombre es Santo: "Yo habito en lo alto y santo, Y también con el contrito y humilde de espíritu, Para vivificar el espíritu de los humildes Y para vivificar el corazón de los contritos. (Isaías 57:15)