Ahora pues, tomen siete novillos y siete carneros, vayan a Mi siervo Job y ofrezcan holocausto por ustedes, y Mi siervo Job orará por ustedes. Porque ciertamente a él atenderé para no hacer con ustedes conforme a su insensatez, porque no han hablado de Mí lo que es recto, como Mi siervo Job."
(Job 42:8)
Y Elifaz el Temanita, y Bildad el Suhita y Zofar el Naamatita fueron e hicieron tal como el SEÑOR les había dicho; y el SEÑOR aceptó a Job.
(Job 42:9)
Y el SEÑOR restauró el bienestar de Job cuando éste oró por sus amigos; y el SEÑOR aumentó al doble todo lo que Job había poseído.
(Job 42:10)
Entonces todos sus hermanos y todas sus hermanas y todos los que le habían conocido antes, vinieron a él y comieron con él en su casa; se condolieron de él y lo consolaron por todo el mal que el SEÑOR había traído sobre él. Cada uno le dio una moneda (11.4 gr) de plata, y cada uno un anillo de oro.
El SEÑOR bendijo los últimos días de Job más que los primeros; y tuvo 14,000 ovejas, 6,000 camellos, 1,000 yuntas de bueyes y 1,000 asnas.
(Job 42:12)
Tuvo además siete hijos y tres hijas.
(Job 42:13)
Llamó a la primera Jemina, a la segunda Cesia y a la tercera Keren Hapuc.
(Job 42:14)
Otras publicaciones relacionadas con "Job 42:11":
Job 42:11 - Referencia Cruzada
Si un miembro sufre, todos los miembros sufren con él; y si un miembro es honrado, todos los miembros se regocijan con él.
(1 Corintios 12:26)
Acuérdense de los presos, como si estuvieran presos con ellos, y de los maltratados, puesto que también ustedes están en el cuerpo.
(Hebreos 13:3)
Cuando tres amigos de Job, Elifaz, el Temanita, Bildad, el Suhita y Zofar, el Naamatita, oyeron de todo este mal que había venido sobre él, vinieron cada uno de su lugar, pues se habían puesto de acuerdo para ir juntos a condolerse de él y a consolarlo.
(Job 2:11)
¿Acaso he dicho: 'Denme algo, De su riqueza ofrézcanme un soborno,
(Job 6:22)
Entonces el siervo sacó objetos de plata, objetos de oro y vestidos, y se los dio a Rebeca. También dio cosas preciosas a su hermano y a su madre.
(Génesis 24:53)
Los huesos de José, que los Israelitas habían traído de Egipto, fueron sepultados en Siquem, en la parcela de campo que Jacob había comprado a los hijos de Hamor, padre de Siquem, por 100 monedas de plata. Y pasaron a ser posesión de los hijos de José.
(Josué 24:32)
y muchos de los Judíos habían venido a la casa de Marta y María, para consolarlas por la muerte de su hermano.
(Juan 11:19)
Al que tropezaba, tus palabras lo levantaban, Y las rodillas débiles fortalecías.
(Job 4:4)
Fortalezcan las manos débiles Y afiancen las rodillas vacilantes.
(Isaías 35:3)
Por tanto, fortalezcan las manos débiles y las rodillas que flaquean,
(Hebreos 12:12)
Todos sus hijos y todas sus hijas vinieron para consolarlo, pero él rehusó ser consolado, y dijo: "Ciertamente enlutado bajaré al Seol (región de los muertos) por causa de mi hijo." Y su padre lloró por él.
(Génesis 37:35)
Pero ciertos hombres indignos dijeron: "¿Cómo puede éste salvarnos?" Y lo despreciaron y no le trajeron presente alguno. Pero él guardó silencio.
(1 Samuel 10:27)
Les podría alentar con mi boca, Y el consuelo de mis labios podría aliviar su dolor.
(Job 16:5)
Gócense con los que se gozan y lloren con los que lloran.
(Romanos 12:15)
Cuando los camellos habían terminado de beber, el hombre tomó un anillo de oro que pesaba medio siclo (5.7 gramos), y dos brazaletes que pesaban diez siclos (114 gramos) de oro.
(Génesis 24:22)
El ha alejado de mí a mis hermanos, Y mis conocidos se han apartado completamente de mí.
(Job 19:13)
Cuando los caminos del hombre son agradables al SEÑOR, Aun a sus enemigos hace que estén en paz con él.
(Proverbios 16:7)