Nueva Biblia Latinoamericana
Y Samuel dijo a todo el pueblo: "¿Ven al que el SEÑOR ha escogido? En verdad que no hay otro como él entre todo el pueblo." Entonces todo el pueblo gritó, y dijo: "¡Viva el rey!" (1 Samuel 10:24)
Entonces Samuel dio al pueblo las ordenanzas del reino, y las escribió en el libro, el cual puso delante del SEÑOR. Y despidió Samuel a todo el pueblo, cada uno a su casa. (1 Samuel 10:25)
Saúl también se fue a su casa en Guibeá, y con él fueron los valientes cuyos corazones Dios había tocado. (1 Samuel 10:26)
Pero ciertos hombres indignos dijeron: "¿Cómo puede éste salvarnos?" Y lo despreciaron y no le trajeron presente alguno. Pero él guardó silencio.
Y subió Nahas el Amonita y sitió a Jabes de Galaad, y todos los hombres de Jabes dijeron a Nahas: "Haz un pacto con nosotros y te serviremos." (1 Samuel 11:1)
Pero Nahas el Amonita les dijo: "Lo haré con esta condición: que a todos ustedes les saque yo el ojo derecho; así haré que esto sea una afrenta sobre todo Israel." (1 Samuel 11:2)
Y los ancianos de Jabes le dijeron: "Danos siete días para que enviemos mensajeros por todo el territorio de Israel. Y si no hay quien nos libre, nos entregaremos a ti." (1 Samuel 11:3)

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1 Samuel 10:27 - Referencia Cruzada

Pero ellos se quedaron callados y no le respondieron palabra alguna; porque el rey había dado un mandato al pueblo diciéndole: "No le respondan." (Isaías 36:21)
Salomón gobernaba todos los reinos desde el Río (Eufrates) hasta la tierra de los Filisteos y hasta la frontera de Egipto. Ellos trajeron tributo y sirvieron a Salomón todos los días de su vida. (1 Reyes 4:21)
Entrando en la casa, vieron al Niño con Su madre María, y postrándose Lo adoraron; y abriendo sus tesoros Le presentaron obsequios de oro, incienso y mirra. (Mateo 2:11)
Ustedes, que son tercos e incircuncisos de corazón y de oídos, resisten siempre al Espíritu Santo; como hicieron sus padres, así hacen también ustedes. (Hechos 7:51)
Con él se juntaron hombres indignos y malvados que prevalecieron sobre Roboam, hijo de Salomón, cuando Roboam era joven y tímido, y no pudo prevalecer contra ellos. (2 Crónicas 13:7)
Al ser acusado por los principales sacerdotes y los ancianos, nada respondió. (Mateo 27:12)
Los reyes de Tarsis y de las islas traigan presentes; Los reyes de Sabá y de Seba ofrezcan tributo; (Salmos 72:10)
Pero yo, como el sordo, no oigo; Soy como el mudo que no abre la boca. (Salmos 38:13)
Pero los hijos de Elí eran hombres indignos; no conocían al SEÑOR (1 Samuel 2:12)
También derrotó a Moab, y los midió con cordel, haciéndolos tenderse en tierra. Midió dos cordeles para darles muerte, y un cordel entero para dejarlos vivos. Y los Moabitas fueron siervos de David, trayéndole tributo. (2 Samuel 8:2)
Y se encontraba allí un hombre indigno que se llamaba Seba, hijo de Bicri, el Benjamita; y éste tocó la trompeta y dijo: "No tenemos parte con David, Ni tenemos heredad con el hijo de Isaí; ¡Israel, cada uno a sus tiendas!" (2 Samuel 20:1)
han salido hombres indignos de en medio de ti y han seducido a los habitantes de su ciudad, diciendo: 'Vamos y sirvamos a otros dioses' (a quienes no has conocido), (Deuteronomio 13:13)
Entonces el pueblo dijo a Samuel: "¿Quién es el que dijo: '¿Ha de reinar Saúl sobre nosotros?' Traigan a esos hombres para que los matemos." (1 Samuel 11:12)
Cada uno de ellos traía su presente: objetos de plata y objetos de oro, vestidos, armas, especias, caballos y mulos; y así año tras año. (1 Reyes 10:25)
Este Moisés, a quien ellos rechazaron, diciendo: '¿QUIEN TE HA PUESTO POR GOBERNANTE Y JUEZ?' es el mismo que Dios envió para ser gobernante y libertador con la ayuda del ángel que se le apareció en la zarza. (Hechos 7:35)
El SEÑOR, pues, afirmó el reino bajo su mano; y todo Judá le traía presentes a Josafat, y tuvo grandes riquezas y honores. (2 Crónicas 17:5)