Nueva Biblia Latinoamericana
El ojo del que me ve no me verá más; Tus ojos estarán sobre mí, pero yo no existiré. (Job 7:8)
Como una nube se desvanece y pasa, Así el que desciende al Seol (región de los muertos) no subirá; (Job 7:9)
No volverá más a su casa, Ni su lugar lo verá más. (Job 7:10)
Por tanto, no refrenaré mi boca, Hablaré en la angustia de mi espíritu, Me quejaré en la amargura de mi alma.
¿Soy yo el mar, o un monstruo marino, Para que Tú me pongas guardia? (Job 7:12)
Si digo: 'Mi cama me consolará, Mi lecho atenuará mi queja,' (Job 7:13)
Entonces Tú me asustas con sueños Y me aterrorizas con visiones. (Job 7:14)

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Job 7:11 - Referencia Cruzada

Ardía mi corazón dentro de mí; Mientras meditaba, se encendió el fuego; Entonces dije con mi lengua: (Salmos 39:3)
Y estando en agonía, oraba con mucho fervor; y Su sudor se volvió como gruesas gotas de sangre, que caían sobre la tierra. (Lucas 22:44)
He proclamado buenas nuevas de justicia en la gran congregación; No refrenaré mis labios, Oh SEÑOR, Tú lo sabes. (Salmos 40:9)
Cállense delante de mí para que yo pueda hablar; Y que venga lo que venga sobre mí. (Job 13:13)
Pero cuando ella llegó al monte, al hombre de Dios, se abrazó de sus pies. Y Giezi se acercó para apartarla, pero el hombre de Dios dijo: "Déjala, porque su alma está angustiada y el SEÑOR me lo ha ocultado y no me lo ha revelado." (2 Reyes 4:27)
Y tomando con El a Pedro y a los dos hijos de Zebedeo, comenzó a entristecerse y a angustiarse. (Mateo 26:37)
Entonces se dijeron el uno al otro: "Verdaderamente somos culpables en cuanto a nuestro hermano, porque vimos la angustia de su alma cuando nos rogaba, y no lo escuchamos, por eso ha venido sobre nosotros esta angustia." (Génesis 42:21)
¿Qué diré? Pues El me ha hablado y El mismo lo ha hecho. Andaré errante todos mis años a causa de la amargura de mi alma. (Isaías 38:15)
¿Piensan censurar mis palabras, Cuando las palabras del desesperado se las lleva el viento? (Job 6:26)
Por causa de mi bienestar tuve gran amargura. Eres Tú quien ha guardado mi alma del abismo de la nada, Porque echaste tras Tus espaldas todos mis pecados. (Isaías 38:17)
Hastiado estoy de mi vida: Daré rienda suelta a mi queja, Hablaré en la amargura de mi alma. (Job 10:1)
Pues por la mucha aflicción y angustia de corazón les escribí con muchas lágrimas, no para entristecerlos, sino para que conozcan el amor que tengo especialmente por ustedes. (2 Corintios 2:4)
ella, muy angustiada, oraba al SEÑOR y lloraba amargamente. (1 Samuel 1:10)
Tengan paciencia y hablaré; Y después que haya hablado, se podrán burlar. (Job 21:3)
Si hablo, mi dolor no disminuye, Y si callo, no se aparta de mí. (Job 16:6)
Mientras otro muere con alma amargada, Y sin haber probado nada bueno. (Job 21:25)
Si soy malvado, ¡ay de mí!, Y si soy justo, no me atrevo a levantar la cabeza. Estoy lleno de deshonra y consciente de mi aflicción. (Job 10:15)