Dios quiere que se levante un pueblo que no tenga nada que perder
Dr. Roberto Miranda(Audio: Español)
El príncipe de Samaria reacciona con incredulidad y casi blasfema contra Dios al cuestionar en una forma muy radical esta promesa de parte del profeta Eliseo de que mañana a esa misma hora habría comida abundante para todo el pueblo.
Y usa una imagen blasfema diciendo: bueno si Dios hiciera llover, si abriera la ventana de los cielos aún así no sería suficiente. Y hablábamos en la ultima meditación acerca de que este hombre representa esa porción incrédula de la Iglesia que será abandonada por el poder de Dios y que inclusive será enjuiciada por su incredulidad.