Hay que comenzar a fluir en lo que Dios te da
Dr. Roberto Miranda
(Audio: Español)
RESUMEN: El pastor habla sobre cómo el mover profético de Dios puede manifestarse a través de la adoración espontánea en la iglesia. Él menciona un pasaje en la Biblia donde Eliseo pide un tañedor para tocar música y desatar la unción del Espíritu Santo. Cuando la iglesia busca esta unción de Dios en la adoración, pueden surgir palabras proféticas y bendiciones inesperadas. El pastor también habla sobre cómo la clave para un ministerio efectivo es estar en comunión íntima con el espíritu infinito de Dios para poder producir sin tener que prepararse demasiado.
En este sermón, el pastor habla sobre la importancia de estar en comunión íntima con el espíritu infinito de Dios para tener éxito en el ministerio de la iglesia y la adoración. También habla sobre la necesidad de fluir en el mover del Espíritu Santo y tener discernimiento para distinguir entre la carne y la verdadera profecía. El pastor también explica los dos modelos de funcionamiento de la iglesia en la Biblia: el modelo del tabernáculo y el modelo del templo. Finalmente, el pastor habla sobre el valor simbólico del nombre de su iglesia, Congregación León de Judá, y cómo Dios le habló acerca de su llamado para estar en Boston y funcionar en la modalidad del león.
El pastor habla sobre la importancia de la adoración y de aprender a adorar a Dios. También menciona la importancia de prepararse y santificarse antes de hacer guerra espiritual. Habla sobre un sueño que tuvo hace años donde vio tres tumbas en un cementerio colonial y sintió la necesidad de orar por resurrección, pero Satanás malogró el milagro. El pastor dice que Dios tiene un propósito mayor para la iglesia y que debemos ser humildes y vaciarnos para que Dios pueda llenarnos con su aceite. Pide a Dios que nos muestre nuestra nueva identidad como pueblo y que glorifiquemos solo a Jesucristo.
El orador reza para que Dios borre la personalidad, la historia y el programa de la congregación y les muestre su nueva identidad. Piden que Dios no les permita regresar a Egipto y que les dé una mentalidad clara y resuelta. Se pide que Dios los visite y los preñe con su vida para que solo se vea a Jesucristo en la iglesia y que toda la gloria sea exclusivamente para él.
En este sermón, el pastor habla sobre la importancia de estar en comunión íntima con el espíritu infinito de Dios para tener éxito en el ministerio de la iglesia y la adoración. También habla sobre la necesidad de fluir en el mover del Espíritu Santo y tener discernimiento para distinguir entre la carne y la verdadera profecía. El pastor también explica los dos modelos de funcionamiento de la iglesia en la Biblia: el modelo del tabernáculo y el modelo del templo. Finalmente, el pastor habla sobre el valor simbólico del nombre de su iglesia, Congregación León de Judá, y cómo Dios le habló acerca de su llamado para estar en Boston y funcionar en la modalidad del león.
El pastor habla sobre la importancia de la adoración y de aprender a adorar a Dios. También menciona la importancia de prepararse y santificarse antes de hacer guerra espiritual. Habla sobre un sueño que tuvo hace años donde vio tres tumbas en un cementerio colonial y sintió la necesidad de orar por resurrección, pero Satanás malogró el milagro. El pastor dice que Dios tiene un propósito mayor para la iglesia y que debemos ser humildes y vaciarnos para que Dios pueda llenarnos con su aceite. Pide a Dios que nos muestre nuestra nueva identidad como pueblo y que glorifiquemos solo a Jesucristo.
El orador reza para que Dios borre la personalidad, la historia y el programa de la congregación y les muestre su nueva identidad. Piden que Dios no les permita regresar a Egipto y que les dé una mentalidad clara y resuelta. Se pide que Dios los visite y los preñe con su vida para que solo se vea a Jesucristo en la iglesia y que toda la gloria sea exclusivamente para él.
Creo que lo hablé un poquito el domingo pasado, de cómo el Señor a través de los años me ha llevado a un tipo de adoración espontánea que yo practico en mi propia vida y que muchas veces he querido también introducirlo a la iglesia que se puede considerar como adoración profética o adoración del momento no practicado, no pre concebido.
Y esta mañana mientras estábamos a punto de comenzar el servicio el Señor me movió, yo creo que fue el Señor, a iniciar un cántico en inglés, entra en la presencia del Señor y alza tu voz y adórale, etc. No estaba en el programa y yo siempre tengo mucho temor de poner a la gente en agonía en términos de que eso no está en el programa, los músicos qué hacen, la tecnología, si va a aparecer el coro o no, y todo este tipo de cosas, y francamente por respeto no por temor, porque como pastor uno dice, bueno, yo tengo el derecho a hacer esas cosas. Pero por respeto no me gusta a poner a la gente en incomodidad. Pero yo he dicho que si no hay incomodidad no es profecía, no es mover de Dios. Dios se mueve en la incomodidad, Dios se mueve en la incertidumbre.
Y esta mañana mientras estábamos a punto de comenzar el servicio el Señor me movió, yo creo que fue el Señor, a iniciar un cántico en inglés, entra en la presencia del Señor y alza tu voz y adórale, etc. No estaba en el programa y yo siempre tengo mucho temor de poner a la gente en agonía en términos de que eso no está en el programa, los músicos qué hacen, la tecnología, si va a aparecer el coro o no, y todo este tipo de cosas, y francamente por respeto no por temor, porque como pastor uno dice, bueno, yo tengo el derecho a hacer esas cosas. Pero por respeto no me gusta a poner a la gente en incomodidad. Pero yo he dicho que si no hay incomodidad no es profecía, no es mover de Dios. Dios se mueve en la incomodidad, Dios se mueve en la incertidumbre.
