Para el director del coro. Salmo de los hijos de Coré, compuesto para Alamot. Cántico. Dios es nuestro refugio y fortaleza, Nuestro pronto auxilio en las tribulaciones.
(Psalm 46:1)Por tanto, no temeremos aunque la tierra sufra cambios, Y aunque los montes se deslicen al fondo de los mares;
(Psalm 46:2)Aunque bramen y se agiten sus aguas, Aunque tiemblen los montes con creciente enojo. (Selah)
(Psalm 46:3)Hay un río cuyas corrientes alegran la ciudad de Dios, Las moradas santas del Altísimo.
Dios está en medio de ella, no será sacudida; Dios la ayudará al romper el alba.
(Psalm 46:5)Bramaron las naciones, se tambalearon los reinos; Dio El Su voz, y la tierra se derritió.
(Psalm 46:6)El SEÑOR de los ejércitos está con nosotros; Nuestro baluarte es el Dios de Jacob. (Selah)
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Envía Tu luz y Tu verdad; que ellas me guíen, Que me lleven a Tu santo monte Y a Tus moradas.
(Psalm 43:3)Después me hizo volver a la entrada del templo; y vi que brotaban aguas de debajo del umbral del templo hacia el oriente, porque la fachada del templo daba hacia el oriente. Y las aguas descendían de debajo, del lado derecho del templo, al sur del altar.
(Ezekiel 47:1)Si ves la opresión del pobre y la negación del derecho y de la justicia en la provincia, no te sorprendas del hecho, porque un oficial vigila sobre otro oficial, y hay oficiales superiores sobre ellos.
(Ecclesiastes 5:8)Entonces me llevó en el Espíritu a un monte grande y alto, y me mostró la ciudad santa, Jerusalén, que descendía del cielo, de Dios,
(Revelation 21:10)Después el ángel me mostró un río de agua de vida, resplandeciente como cristal, que salía del trono de Dios y del Cordero,
(Revelation 22:1)Porque defenderé esta ciudad para salvarla por amor a Mí mismo y por amor a Mi siervo David.'"
(Isaiah 37:35)Por cuanto este pueblo ha rehusado las aguas de Siloé que corren mansamente, Y se ha regocijado en Rezín y en el hijo de Remalías,
(Isaiah 8:6)Y vi la ciudad santa, la nueva Jerusalén, que descendía del cielo, de Dios, preparada como una novia ataviada para su esposo.
(Revelation 21:2)Salmo. Cántico para el día de reposo. Bueno es dar gracias al SEÑOR, Y cantar alabanzas a Tu nombre, oh Altísimo;
(Psalm 92:1)En lugares de verdes pastos me hace descansar; Junto a aguas de reposo me conduce.
(Psalm 23:2)Cántico. Salmo de los hijos de Coré. Grande es el SEÑOR, y muy digno de ser alabado En la ciudad de nuestro Dios, Su santo monte.
(Psalm 48:1)Se sacian de la abundancia de Tu casa, Y les das a beber del río de Tus delicias.
(Psalm 36:8)entonces sucederá que al lugar que el SEÑOR, su Dios, escoja para morada de Su nombre, allí traerán todo lo que yo les mando: sus holocaustos y sus sacrificios, sus diezmos y la ofrenda alzada de su mano, y todo lo más selecto de sus ofrendas votivas que han prometido al SEÑOR.
(Deuteronomy 12:11)¿Con qué me presentaré al SEÑOR Y me postraré ante el Dios de lo alto? ¿Me presentaré delante de El con holocaustos, Con becerros de un año?
(Micah 6:6)Ustedes, en cambio, se han acercado al Monte Sion y a la ciudad del Dios vivo, la Jerusalén celestial, y a miríadas de ángeles,
(Hebrews 12:22)Como lo hemos oído, así lo hemos visto En la ciudad del SEÑOR de los ejércitos, en la ciudad de nuestro Dios; Dios la afirmará para siempre. (Selah)
(Psalm 48:8)Tú visitas la tierra y la riegas en abundancia, En gran manera la enriqueces. El río de Dios rebosa de agua; Tú les preparas su grano, porque así preparas la tierra.
(Psalm 65:9)mas escogí a Jerusalén para que Mi nombre estuviera allí, y escogí a David para que estuviera sobre Mi pueblo Israel.'
(2 Chronicles 6:6)Vendrán a ti humillados los hijos de los que te afligieron, Se postrarán a las plantas de tus pies todos los que te despreciaban, Y te llamarán Ciudad del SEÑOR, Sion del Santo de Israel.
(Isaiah 60:14)¡Si tan sólo hubieras atendido a Mis mandamientos! Entonces habría sido tu paz como un río, Y tu justicia como las olas del mar.
(Isaiah 48:18)El que habita al amparo del Altísimo Morará a la sombra del Omnipotente.
(Psalm 91:1)Pero Tú, oh SEÑOR, excelso eres eternamente.
(Psalm 92:8)Cosas gloriosas se dicen de Ti, Oh ciudad de Dios: (Selah)
(Psalm 87:3)