Nueva Biblia Latinoamericana
Pero el rey de Aram había ordenado a los treinta y dos capitanes de sus carros, diciendo: "No peleen contra chico ni contra grande, sino sólo contra el rey de Israel." (1 Reyes 22:31)
Cuando los capitanes de los carros vieron a Josafat, dijeron: "Ciertamente éste es el rey de Israel," y se desviaron para pelear contra él, pero Josafat gritó. (1 Reyes 22:32)
Al ver los capitanes de los carros que no era el rey de Israel, dejaron de perseguirlo. (1 Reyes 22:33)
Un hombre disparó su arco al azar e hirió al rey de Israel por entre la juntura de la armadura. Y él dijo a su cochero: "Da la vuelta y sácame de la batalla, pues estoy gravemente herido."
Pero la batalla arreció aquel día, y el rey fue sostenido en su carro frente a los Arameos y al atardecer murió. La sangre de la herida corría hasta el fondo del carro. (1 Reyes 22:35)
A la puesta del sol, pasó un grito por el ejército que decía: "Cada hombre a su ciudad y cada uno a su tierra." (1 Reyes 22:36)
Pues el rey había muerto. Y fue llevado a Samaria, y sepultaron al rey en Samaria. (1 Reyes 22:37)

Otras publicaciones relacionadas con "1 Reyes 22:34":

Dr. Roberto Miranda
De la crisis a la bendición
El autor, Dr. Roberto Miranda, habla sobre cómo el capítulo 20 de Segundo de Crónicas de la Biblia puede ser un modelo para la vida cristiana en tiempos de crisis. Josafat y el pueblo de Judá buscaron a Dios a través de la oración y el ayuno en medio de una crisis nacional y fueron bendecidos con la victoria a través de la fe y la adoración. El artículo también menciona cómo la palabra Beraca se utiliza para describir un negocio cristiano en México y cómo la misma trayectoria de la crisis a la bendición puede ser nuestra si confiamos en Dios.


Dr. Roberto Miranda
Guerra Espiritual (Parte 2)
Este artículo habla sobre la importancia de estar alerta y preparados en la guerra espiritual contra el enemigo, rodearnos de gente sabia y madura en el Espíritu Santo para recibir consejo y discernimiento en nuestras decisiones, y ser temerosos de Dios y obedientes a su voluntad. También se menciona la importancia de discernir cuándo es tiempo de perdonar y cuándo es tiempo de actuar con violencia, y se pide a la iglesia que declare la palabra de Dios en seriedad y rectitud.


1 Reyes 22:34 - Referencia Cruzada

David metió la mano en su saco, sacó de él una piedra, la lanzó con la honda, e hirió al Filisteo en la frente. La piedra se hundió en su frente y Goliat cayó a tierra sobre su rostro. (1 Samuel 17:49)
Y los arqueros hirieron al rey Josías, y el rey dijo a sus siervos: "Llévenme, porque estoy gravemente herido." (2 Crónicas 35:23)
Pero Jehú entesó su arco con toda su fuerza e hirió a Joram en la espalda; y la flecha salió por su corazón y se desplomó en su carro. (2 Reyes 9:24)
Con Absalón fueron 200 hombres de Jerusalén como invitados; fueron inocentemente, sin saber nada. (2 Samuel 15:11)
Por eso Yo también te haré enfermar, hiriéndote, Asolándote por tus pecados. (Miqueas 6:13)
También tenían corazas como corazas de hierro. El ruido de sus alas era como el estruendo de carros, de muchos caballos que se lanzan a la batalla. (Apocalipsis 9:9)
Pero el rey de Aram había ordenado a los capitanes de sus carros: "No peleen contra chico ni contra grande, sino sólo contra el rey de Israel." (2 Crónicas 18:30)