1 Reyes 16:31 - Referencia Cruzada

Entonces los cinco hombres salieron y llegaron a Lais y vieron al pueblo que había en ella viviendo en seguridad, tranquilo y confiado, según la costumbre de los Sidonios. Porque no había gobernante humillándolos en nada en aquella tierra, y estaban lejos de los Sidonios, y no tenían relaciones con nadie. (Jueces 18:7)

En aquellos días también vi a Judíos que se habían casado con mujeres Asdoditas, Amonitas y Moabitas. (Nehemías 13:23)

Porque si se vuelven, y se unen al resto de estos pueblos que permanecen entre ustedes, y contraen matrimonio con ellos, y se juntan con ellos, y ellos con ustedes, (Josué 23:12)

Acab le contó a Jezabel todo lo que Elías había hecho y cómo había matado a espada a todos los profetas. (1 Reyes 19:1)

Porque cuando Salomón ya era viejo, sus mujeres desviaron su corazón tras otros dioses, y su corazón no estuvo dedicado por completo al SEÑOR su Dios, como había estado el corazón de David su padre. (1 Reyes 11:4)

Pero los Israelitas volvieron a hacer lo malo ante los ojos del SEÑOR. Sirvieron a los Baales, a Astarot, a los dioses de Aram, a los dioses de Sidón, a los dioses de Moab, a los dioses de los Amonitas y a los dioses de los Filisteos. Abandonaron, pues, al SEÑOR y no le sirvieron. (Jueces 10:6)

pues cuando Jezabel destruyó a los profetas del SEÑOR, Abdías tomó a cien profetas y los escondió de cincuenta en cincuenta en una cueva, y los sustentó con pan y agua.) (1 Reyes 18:4)

Entonces Jehú reunió a todo el pueblo, y les dijo: "Acab sirvió a Baal un poco, Jehú lo servirá mucho. (2 Reyes 10:18)

Y abandonaron todos los mandamientos del SEÑOR su Dios, y se hicieron imágenes fundidas de dos becerros; hicieron una Asera (deidad femenina), adoraron a todo el ejército de los cielos y sirvieron a Baal. (2 Reyes 17:16)

Pero ella le respondió: "¿Te parece poco haberme quitado el marido? ¿Me quitarás también las mandrágoras de mi hijo?" "Que él duerma, pues, contigo esta noche a cambio de las mandrágoras de tu hijo," le dijo Raquel. (Génesis 30:15)

Y llegó Jehú a Jezreel, y cuando Jezabel lo oyó, se pintó los ojos, adornó su cabeza y se asomó por la ventana. (2 Reyes 9:30)

No contraerás matrimonio con ellos; no darás tus hijas a sus hijos, ni tomarás sus hijas para tus hijos. (Deuteronomio 7:3)

Ciertamente no hubo nadie como Acab que se vendiera para hacer lo malo ante los ojos del SEÑOR, porque Jezabel su mujer lo había convencido. (1 Reyes 21:25)

¿No les es suficiente que el Dios de Israel los haya separado del resto de la congregación de Israel, para acercarlos a El, a fin de cumplir el ministerio del tabernáculo del SEÑOR, y para estar ante la congregación para ministrarles, (Números 16:9)

Cuando los Sidonios, los Amalecitas y los Maonitas los oprimían, clamaron a Mí, y Yo los libré de sus manos. (Jueces 10:12)

Entonces Isaías dijo: "Oigan ahora, casa de David: ¿Les parece poco cansar a los hombres, que también cansarán a mi Dios? (Isaías 7:13)

los hijos de Dios vieron que las hijas de los hombres eran hermosas, y tomaron para sí mujeres de entre todas las que les gustaban. (Génesis 6:2)

Y El me dijo: "¿Has visto, hijo de hombre? ¿Le parece poco a la casa de Judá cometer las abominaciones que aquí han cometido, que han llenado la tierra de violencia y Me han provocado repetidas veces? Porque se llevan el ramo a la nariz. (Ezequiel 8:17)

Los Israelitas hicieron lo malo ante los ojos del SEÑOR, y olvidaron al SEÑOR su Dios, y sirvieron a los Baales y a las imágenes de Asera (deidad femenina). (Jueces 3:7)

Ahora pues, envía a reunir conmigo a todo Israel en el Monte Carmelo, junto con 450 profetas de Baal y 400 profetas de la Asera que comen a la mesa de Jezabel." (1 Reyes 18:19)

Tomaste además a tus hijos y a tus hijas que habías dado a luz para Mí, y se los sacrificaste como alimento. ¿Acaso eran poca cosa tus prostituciones, (Ezequiel 16:20)

¿Les parece poco comer en los buenos pastos, para que después hollen con sus pies el resto de sus pastos; o que beban de las aguas claras, para que después enturbien el resto con sus pies? (Ezequiel 34:18)

Pero tengo esto contra ti: que toleras a esa mujer Jezabel, que se dice ser profetisa, y enseña y seduce a Mis siervos a que cometan actos inmorales y coman cosas sacrificadas a los ídolos. (Apocalipsis 2:20)

Pero el rey Salomón, además de la hija de Faraón, amó a muchas mujeres extranjeras, Moabitas, Amonitas, Edomitas, Sidonias e Hititas, (1 Reyes 11:1)

Pero no sólo has andado en sus caminos y has hecho según sus abominaciones, sino que, como si eso fuera muy poco, te has corrompido más que ellas en todos tus caminos. (Ezequiel 16:47)

Pero Jezabel su mujer se acercó a él, y le preguntó: "¿Por qué está tu espíritu tan decaído que no comes?" (1 Reyes 21:5)

Entonces los Israelitas hicieron lo malo ante los ojos del SEÑOR y sirvieron (adoraron) a los Baales. (Jueces 2:11)