Entonces me llevó a la entrada de la puerta de la casa del SEÑOR que está al norte; y había allí mujeres sentadas llorando a Tamuz.
(Ezequiel 8:14)Y me dijo: "¿Has visto, hijo de hombre? Aún verás mayores abominaciones que éstas."
(Ezequiel 8:15)Entonces me llevó al atrio interior de la casa del SEÑOR. Y a la entrada del templo del SEÑOR, entre el pórtico y el altar, había unos veinticinco hombres de espaldas al templo del SEÑOR y de cara al oriente, y se postraban hacia el oriente, hacia el sol.
(Ezequiel 8:16)Y El me dijo: "¿Has visto, hijo de hombre? ¿Le parece poco a la casa de Judá cometer las abominaciones que aquí han cometido, que han llenado la tierra de violencia y Me han provocado repetidas veces? Porque se llevan el ramo a la nariz.
Por tanto, ciertamente Yo obraré con furor. Mi ojo no tendrá piedad, ni Yo perdonaré; y aunque griten a Mis oídos con gran voz, no los escucharé."
(Ezequiel 8:18)Entonces Dios gritó a mis oídos con gran voz, diciendo: "Acérquense, verdugos de la ciudad, cada uno con su arma destructora en la mano."
(Ezequiel 9:1)Y seis hombres venían por el camino de la puerta superior que mira al norte, cada uno con su arma destructora en la mano. Entre ellos había un hombre vestido de lino con una cartera de escribano a la cintura. Y entraron y se pusieron junto al altar de bronce.
(Ezequiel 9:2)Otras publicaciones relacionadas con "Ezequiel 8:17":
Ezequiel 8:17 - Referencia Cruzada
Porque los ricos de la ciudad están llenos de violencia, Sus habitantes hablan mentiras Y su lengua es engañosa en su boca.
(Miqueas 6:12)Codician campos y se apoderan de ellos , Codician casas, y las toman. Roban al dueño y a su casa, Al hombre y a su heredad.
(Miqueas 2:2)Además, Manasés derramó muchísima sangre inocente hasta llenar a Jerusalén de un extremo a otro, aparte de su pecado con el que hizo pecar a Judá para que hiciera lo malo ante los ojos del SEÑOR.
(2 Reyes 21:16)También por la sangre inocente que derramó, pues llenó a Jerusalén de sangre inocente, y el SEÑOR no quiso perdonar.
(2 Reyes 24:4)Como un pozo mantiene frescas sus aguas, Así ella mantiene fresca su maldad. En ella se oyen violencia y destrucción; Ante Mí hay de continuo enfermedades y heridas.
(Jeremías 6:7)Han multiplicado sus muertos en esta ciudad, han llenado sus calles de muertos."
(Ezequiel 11:6)No saben hacer lo recto," declara el SEÑOR, "los que acumulan violencia y destrucción en sus palacios."
(Amós 3:10)Entonces el SEÑOR me respondió: "La iniquidad de la casa de Israel y de Judá es grande en extremo, la tierra está llena de sangre y la ciudad está llena de perversión; porque dicen: 'El SEÑOR ha abandonado la tierra, el SEÑOR nada ve.'
(Ezequiel 9:9)También te prostituiste a los Egipcios, tus vecinos de cuerpos robustos, y multiplicaste tu prostitución para provocarme a ira.
(Ezequiel 16:26)Se ha levantado la violencia para hacerse vara de impiedad. Nada quedará de ellos, ni de su multitud, ni de su riqueza, ni gloria entre ellos.
(Ezequiel 7:11)Porque cada vez que hablo, grito; Proclamo: ¡Violencia, destrucción! Pues la palabra del SEÑOR ha venido a ser para mí Oprobio y escarnio cada día.
(Jeremías 20:8)Porque ellos Me han abandonado, han hecho extraño este lugar y han ofrecido sacrificios (quemado incienso) en él a otros dioses, que ni ellos, ni sus padres, ni los reyes de Judá habían conocido, y porque han llenado este lugar de sangre de inocentes
(Jeremías 19:4)Aquel día castigaré A todos los que saltan sobre el umbral, A los que llenan la casa de su señor De violencia y de engaño.
(Sofonías 1:9)Entonces Dios dijo a Noé: "He decidido poner fin a toda carne, porque la tierra está llena de violencia por causa de ellos; por eso voy a destruirlos junto con la tierra.
(Génesis 6:13)Los hijos recogen la leña, los padres encienden el fuego, las mujeres preparan la masa para hacer tortas a la reina del cielo, y derraman libaciones a otros dioses para ofenderme."
(Jeremías 7:18)Haz la cadena, porque la tierra está llena de crímenes sangrientos y la ciudad llena de violencia.
(Ezequiel 7:23)¿Alejan ustedes el día de la calamidad, Y acercan la silla de la violencia?
(Amós 6:3)