Nueva Biblia Latinoamericana
Perseguí a mis enemigos y los destruí, Y no me volví hasta acabarlos. (2 Samuel 22:38)
Los he consumido y los he destrozado, y no pudieron levantarse; Cayeron debajo de mis pies. (2 Samuel 22:39)
Pues Tú me has ceñido con fuerzas para la batalla; Has subyugado debajo de mí a los que contra mí se levantaron. (2 Samuel 22:40)
También has hecho que mis enemigos me vuelvan las espaldas, Y destruí a los que me odiaban.
Clamaron, pero no hubo quién los salvara; Aun al SEÑOR clamaron, mas no les respondió. (2 Samuel 22:42)
Entonces los pulvericé, como polvo de la tierra, Como lodo de las calles los trituré y los pisé. (2 Samuel 22:43)
Tú me has librado también de las contiendas de mi pueblo; Me has guardado para ser cabeza de naciones; Pueblo que yo no conocía me sirve. (2 Samuel 22:44)

Otras publicaciones relacionadas con "2 Samuel 22:41":

Charles Spurgeon
El Señor es capaz de detener a todos los enemigos de Su pueblo
Artículo sobre la capacidad del Señor para detener a los enemigos del pueblo y cómo podemos confiar en Él en tiempos de temor.


Charles Spurgeon
Ninguna arma forjada contra ti prosperará
Artículo sobre la promesa divina de que ninguna arma forjada contra ti prosperará, y cómo las falsedades y calumnias se volverán en honra para los hombres buenos.


2 Samuel 22:41 - Referencia Cruzada

A ti Judá, te alabarán tus hermanos; Tu mano estará en el cuello de tus enemigos; Se inclinarán a ti los hijos de tu padre. (Génesis 49:8)
Pero sus ciudadanos lo odiaban, y enviaron una delegación tras él, diciendo: 'No queremos que éste reine sobre nosotros.' (Lucas 19:14)
Hallará Tu mano a todos Tus enemigos; Tu diestra hallará a aquéllos que Te odian. (Salmos 21:8)
También has hecho que mis enemigos me vuelvan las espaldas, Y destruí a los que me odiaban. (Salmos 18:40)
dando castigo a los que no conocen a Dios, y a los que no obedecen al evangelio (las buenas nuevas) de nuestro Señor Jesús. (2 Tesalonicenses 1:8)
Cuando llevaron estos reyes a Josué, Josué llamó a todos los hombres de Israel, y dijo a los jefes de los hombres de guerra que habían ido con él: "Acérquense, pongan su pie sobre el cuello de estos reyes." Ellos se acercaron y pusieron los pies sobre sus cuellos. (Josué 10:24)
Pero a estos mis enemigos, que no querían que reinara sobre ellos, tráiganlos acá y mátenlos delante de mí." (Lucas 19:27)
Enviaré Mi terror delante de ti, y llenaré de confusión a todo pueblo donde llegues; y haré que todos tus enemigos vuelvan la espalda ante ti. (Éxodo 23:27)