Nueva Biblia Latinoamericana
Y ella me dijo: 'Te ruego que me dejes espigar y recoger tras los segadores entre las gavillas.' Y vino y ha permanecido desde la mañana hasta ahora; sólo se ha sentado en la casa por un momento." (Rut 2:7)
Entonces Booz dijo a Rut: "Oye, hija mía. No vayas a espigar a otro campo; tampoco pases de aquí, sino quédate con mis criadas. (Rut 2:8)
Fíjate en el campo donde ellas siegan y síguelas, pues he ordenado a los siervos que no te molesten. Cuando tengas sed, ve a las vasijas y bebe del agua que sacan los siervos." (Rut 2:9)
Ella bajó su rostro, se postró en tierra y le dijo: "¿Por qué he hallado gracia ante sus ojos para que se fije en mí, siendo yo extranjera?"
Booz le respondió: "Todo lo que has hecho por tu suegra después de la muerte de tu esposo me ha sido informado en detalle, y cómo dejaste a tu padre, a tu madre y tu tierra natal, y viniste a un pueblo que antes no conocías. (Rut 2:11)
Que el SEÑOR recompense tu obra y que tu pago sea completo de parte del SEÑOR, Dios de Israel, bajo cuyas alas has venido a refugiarte." (Rut 2:12)
Entonces ella dijo: "Señor mío, he hallado gracia ante sus ojos, porque me ha consolado y en verdad ha hablado con bondad a su sierva, aunque yo no soy ni como una de sus criadas." (Rut 2:13)

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Rut 2:10 - Referencia Cruzada

Entonces ella dijo: "Señor mío, he hallado gracia ante sus ojos, porque me ha consolado y en verdad ha hablado con bondad a su sierva, aunque yo no soy ni como una de sus criadas." (Rut 2:13)
Porque tuve hambre, y ustedes Me dieron de comer; tuve sed, y Me dieron de beber; fui extranjero, y Me recibieron; (Mateo 25:35)
Cayó sobre su rostro a los pies de Jesús, y Le dio gracias; y éste era Samaritano. (Lucas 17:16)
El se postró de nuevo, y dijo: "¿Quién es su siervo, para que tome en cuenta a un perro muerto como yo?" (2 Samuel 9:8)
Cuando Abigail vio a David se dio prisa y bajó de su asno, y cayendo sobre su rostro delante de David, se postró en tierra. (1 Samuel 25:23)
Porque toda la casa de mi padre no era más que hombres muertos ante mi señor el rey. Con todo, puso a su siervo entre los que comían a su propia mesa. ¿Qué derecho tengo todavía para quejarme más al rey?" (2 Samuel 19:28)
Y Rut la Moabita dijo a Noemí: "Te ruego que me dejes ir al campo a recoger espigas en pos de aquél a cuyos ojos halle gracia." Ella le respondió: "Ve, hija mía." (Rut 2:2)
Jesús iba con ellos, pero cuando ya no estaba lejos de la casa, el centurión envió a unos amigos, diciendo: "Señor, no te molestes más, porque no soy digno de que Tú entres bajo mi techo; (Lucas 7:6)
Sean afectuosos unos con otros con amor fraternal; con honra, dándose preferencia unos a otros. (Romanos 12:10)
Entonces una mujer Cananea que había salido de aquella región, comenzó a gritar: "Señor, Hijo de David, ten misericordia de mí; mi hija está terriblemente endemoniada." (Mateo 15:22)
Cuando Abraham alzó los ojos y miró, había tres hombres parados frente a él. Al verlos corrió de la puerta de la tienda a recibirlos, y se postró en tierra, (Génesis 18:2)
Porque ha mirado la humilde condición de esta su sierva; Pues desde ahora en adelante todas las generaciones me tendrán por bienaventurada. (Lucas 1:48)
¿Por qué me ha acontecido esto a mí, que la madre de mi Señor venga a mí? (Lucas 1:43)
Que el extranjero que se ha allegado al SEÑOR, no diga: "Ciertamente el SEÑOR me separará de Su pueblo." Ni diga el eunuco: "Soy un árbol seco." (Isaías 56:3)