Y cuando vino de Jerusalén al encuentro del rey, éste le dijo: "¿Por qué no fuiste conmigo, Mefiboset?"
(2 Samuel 19:25)Y él respondió: "Oh rey, señor mío, mi siervo me engañó; pues su siervo se dijo: 'Me aparejaré un asno para montar en él e ir con el rey,' porque su siervo es cojo.
(2 Samuel 19:26)Además, ha calumniado a su siervo ante mi señor el rey; pero mi señor el rey es como el ángel de Dios; haga, pues, lo que le parezca bien.
(2 Samuel 19:27)Porque toda la casa de mi padre no era más que hombres muertos ante mi señor el rey. Con todo, puso a su siervo entre los que comían a su propia mesa. ¿Qué derecho tengo todavía para quejarme más al rey?"
Y el rey le dijo: "¿Por qué sigues hablando de tus asuntos? Yo he decidido: 'Tú y Siba se repartirán las tierras.'"
(2 Samuel 19:29)Que él las tome todas, ya que mi señor el rey ha vuelto en paz a su propia casa," dijo Mefiboset al rey.
(2 Samuel 19:30)Barzilai el Galaadita también había descendido de Rogelim, y había cruzado el Jordán con el rey para despedirlo en el Jordán.
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2 Samuel 19:28 - Referencia Cruzada
Después de los siete años, la mujer volvió de la tierra de los Filisteos; y salió a implorar al rey por su casa y por su campo.
(2 Reyes 8:3)Y tú, tus hijos y tus siervos cultivarán la tierra para él, y le llevarás los frutos para que el nieto de tu señor tenga alimento. Sin embargo, Mefiboset, nieto de tu señor, comerá siempre a mi mesa." Siba tenía quince hijos y veinte siervos.
(2 Samuel 9:10)que nos entreguen siete hombres de entre sus hijos, y los ahorcaremos delante del SEÑOR en Guibeá de Saúl, el elegido del SEÑOR." "Los entregaré," dijo el rey.
(2 Samuel 21:6)Pero Mefiboset moraba en Jerusalén, porque siempre comía a la mesa del rey. Estaba lisiado de ambos pies.
(2 Samuel 9:13)Indigno soy de toda misericordia y de toda la fidelidad que has mostrado a Tu siervo. Porque con sólo mi cayado crucé este Jordán, y ahora he llegado a tener dos campamentos.
(Génesis 32:10)Esto que has hecho no es bueno. Vive el SEÑOR, todos ustedes ciertamente deberían morir, porque no protegieron a su señor, el ungido del SEÑOR. Y ahora, mira dónde está la lanza del rey y la vasija de agua que estaba a su cabecera."
(1 Samuel 26:16)David le dijo: "No temas, porque ciertamente te mostraré bondad por amor a tu padre Jonatán, y te devolveré toda la tierra de tu abuelo Saúl; y tú comerás siempre a mi mesa."
(2 Samuel 9:7)