Por tanto, dijimos: 'Construyamos ahora un altar, no para holocaustos ni para sacrificios,
(Josué 22:26)sino para que sea testigo entre nosotros y ustedes, y entre nuestras generaciones después de nosotros, que hemos de cumplir el servicio del SEÑOR delante de El con nuestros holocaustos, con nuestros sacrificios y con nuestras ofrendas de paz, para que en el día de mañana los hijos de ustedes no digan a nuestros hijos: "No tienen porción en el SEÑOR."'
(Josué 22:27)Nosotros, pues, dijimos: 'Sucederá el día de mañana, que si nos dicen esto a nosotros o a nuestras generaciones, entonces diremos: "Vean la réplica del altar del SEÑOR que nuestros padres edificaron, no para holocaustos ni para sacrificios, sino más bien como testigo entre nosotros y ustedes."'
(Josué 22:28)Lejos esté de nosotros que nos rebelemos contra el SEÑOR y nos apartemos de seguir hoy al SEÑOR, construyendo un altar para holocaustos, para ofrenda de cereal o para sacrificios, aparte del altar del SEÑOR nuestro Dios que está frente a Su tabernáculo (Su morada)."
Cuando el sacerdote Finees y los principales de la congregación, es decir, las cabezas de las familias de Israel que estaban con él, oyeron las palabras que dijeron los Rubenitas, los Gaditas y la media tribu de Manasés, les pareció bien.
(Josué 22:30)Y Finees, hijo del sacerdote Eleazar, dijo a los Rubenitas, a los Gaditas y a la media tribu de Manasés: "Hoy sabemos que el SEÑOR está en medio de nosotros, porque no han cometido esta infidelidad contra el SEÑOR. Ahora han librado a los Israelitas de la mano del SEÑOR."
(Josué 22:31)Entonces Finees, hijo del sacerdote Eleazar, y los jefes, dejaron a los Rubenitas y a los Gaditas, y regresaron de la tierra de Galaad a la tierra de Canaán, a los Israelitas, y les dieron respuesta.
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Josué 22:29 - Referencia Cruzada
Si nos hemos edificado un altar para apartarnos de seguir al SEÑOR, o para ofrecer holocausto u ofrenda de cereal sobre él, o para ofrecer en él sacrificios de ofrendas de paz, que el SEÑOR mismo nos lo demande.
(Josué 22:23)Y ellos le dijeron: "¿Por qué habla mi señor de esta manera? Lejos esté de sus siervos hacer tal cosa.
(Génesis 44:7)Por tanto, dijimos: 'Construyamos ahora un altar, no para holocaustos ni para sacrificios,
(Josué 22:26)Pero José respondió: "Lejos esté de mí hacer eso. El hombre en cuyo poder ha sido encontrada la copa será mi esclavo. Pero ustedes, suban en paz a su padre."
(Génesis 44:17)Y en cuanto a mí, lejos esté de mí que peque contra el SEÑOR cesando de orar por ustedes, antes bien, les instruiré en el camino bueno y recto.
(1 Samuel 12:23)¿Qué diremos entonces? ¿Que hay injusticia en Dios? ¡De ningún modo!
(Romanos 9:14)¡De ningún modo! Pues de otra manera, ¿cómo juzgaría Dios al mundo?
(Romanos 3:6)¡De ningún modo! Nosotros, que hemos muerto al pecado, ¿cómo viviremos aún en él?
(Romanos 6:2)Y el pueblo respondió: "Lejos esté de nosotros abandonar al SEÑOR para servir a otros dioses.
(Josué 24:16)Pero Nabot le dijo a Acab: "No permita el SEÑOR que le dé la herencia de mis padres."
(1 Reyes 21:3)¿Acaso no es el mismo Ezequías el que ha quitado Sus lugares altos y Sus altares, y ha dicho a Judá y a Jerusalén: "Delante de un solo altar ustedes adorarán, y sobre él quemarán incienso?"
(2 Crónicas 32:12)Pero si ustedes me dicen: 'Nosotros confiamos en el SEÑOR nuestro Dios,' ¿no es El aquel cuyos lugares altos y cuyos altares Ezequías ha quitado y ha dicho a Judá y a Jerusalén: 'Adorarán delante de este altar en Jerusalén'?
(2 Reyes 18:22)