Nueva Biblia Latinoamericana
Pero si consagra su campo después del jubileo, entonces el sacerdote le calculará el precio en proporción a los años que quedan hasta el año de jubileo, y será rebajado de tu valuación. (Levítico 27:18)
Y si el que lo consagra quiere redimir el campo, le añadirá una quinta parte al precio de tu valuación para que pase a su posesión. (Levítico 27:19)
Pero si no quiere redimir el campo, y se vende el campo a otro, ya no podrá redimirlo; (Levítico 27:20)
y cuando quede libre en el jubileo, el campo será consagrado al SEÑOR, como campo dedicado; será para el sacerdote como posesión suya.
Si alguno consagra al SEÑOR un campo que ha comprado, que no es parte del campo de su propiedad, (Levítico 27:22)
entonces el sacerdote le calculará la cantidad de tu valuación hasta el año de jubileo; y en ese día dará tu valuación como cosa consagrada al SEÑOR. (Levítico 27:23)
En el año de jubileo el campo volverá a aquél de quien lo compró, a quien pertenece la posesión de la tierra. (Levítico 27:24)

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Levítico 27:21 - Referencia Cruzada

Nada de lo dedicado al anatema (a la destrucción) quedará en tu mano, para que el SEÑOR se aparte del ardor de Su ira y sea misericordioso contigo, tenga compasión de ti y te multiplique, tal como El juró a tus padres, (Deuteronomio 13:17)
Comerán la ofrenda de cereal, la ofrenda por el pecado y la ofrenda por la culpa; toda cosa consagrada en Israel será de ellos. (Ezequiel 44:29)
Sin embargo, cualquier cosa dedicada que alguien separe para el SEÑOR de lo que posee, sea hombre o animal, o campos de su propiedad, no se venderá ni redimirá. Toda cosa dedicada es santísima al SEÑOR. (Levítico 27:28)
Las casas de las aldeas que no tienen muro alrededor, serán consideradas como campo abierto; tienen derechos de redención, y son recuperadas en el jubileo. (Levítico 25:31)
La ciudad será dedicada al anatema (a la destrucción), ella y todo lo que hay en ella pertenece al SEÑOR. Sólo Rahab la ramera y todos los que están en su casa vivirán, porque ella escondió a los mensajeros que enviamos. (Josué 6:17)
y a cualquiera que no viniera dentro de tres días, conforme al consejo de los jefes y de los ancianos, le serían confiscadas todas sus posesiones y él mismo sería excluido de la asamblea de los desterrados. (Esdras 10:8)
Toda cosa dedicada en Israel, será tuya. (Números 18:14)
Pero si no ha hallado medios suficientes para recobrarla por sí mismo, entonces lo que ha vendido permanecerá en manos del comprador hasta el año de jubileo; pero en el jubileo saldrá de su poder, y el vendedor volverá a su posesión. (Levítico 25:28)
Así consagrarán el quincuagésimo año y proclamarán libertad en la tierra para todos sus habitantes. Será de jubileo para ustedes, y cada uno de ustedes volverá a su posesión, y cada uno de ustedes volverá a su familia. (Levítico 25:10)