Nueva Biblia Latinoamericana
Así que, hermanos, sean cada vez más diligentes para hacer firme su llamado y elección de parte de Dios. Porque mientras hagan (practiquen) estas cosas nunca caerán. (2 Pedro 1:10)
Pues de esta manera les será concedida ampliamente la entrada al reino eterno de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. (2 Pedro 1:11)
Por tanto, siempre estaré listo para recordarles estas cosas, aunque ustedes ya las saben y han sido confirmados en la verdad que está presente en ustedes . (2 Pedro 1:12)
También considero justo, mientras esté en este cuerpo (en esta morada), estimularlos recordándoles estas cosas,
sabiendo que mi separación del cuerpo terrenal es inminente, tal como me lo ha declarado nuestro Señor Jesucristo. (2 Pedro 1:14)
Además, yo procuraré con diligencia, que en todo tiempo, después de mi partida, ustedes puedan recordar estas cosas. (2 Pedro 1:15)
Porque cuando les dimos a conocer el poder y la venida de nuestro Señor Jesucristo, no seguimos fábulas ingeniosamente inventadas, sino que fuimos testigos oculares de Su majestad. (2 Pedro 1:16)

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2 Pedro 1:13 - Referencia Cruzada

Por lo cual te recuerdo que avives el fuego del don de Dios que hay en ti por la imposición de mis manos. (2 Timoteo 1:6)
Por tanto, siempre estaré listo para recordarles estas cosas, aunque ustedes ya las saben y han sido confirmados en la verdad que está presente en ustedes . (2 Pedro 1:12)
Porque sabemos que si la tienda terrenal que es nuestra morada, es destruida, tenemos de Dios un edificio, una casa no hecha por manos, eterna en los cielos. (2 Corintios 5:1)
sabiendo que mi separación del cuerpo terrenal es inminente, tal como me lo ha declarado nuestro Señor Jesucristo. (2 Pedro 1:14)
Y el SEÑOR despertó el espíritu de Zorobabel, hijo de Salatiel, gobernador de Judá, y el espíritu del sumo sacerdote Josué, hijo de Josadac, y el espíritu de todo el remanente del pueblo. Así que vinieron y comenzaron la obra en la casa del SEÑOR de los ejércitos, su Dios, (Hageo 1:14)
Pero cobramos ánimo y preferimos más bien estar ausentes del cuerpo y habitar (estar presentes) con el Señor. (2 Corintios 5:8)
Acuérdense de los presos, como si estuvieran presos con ellos, y de los maltratados, puesto que también ustedes están en el cuerpo. (Hebreos 13:3)
Amados, ésta es ya la segunda carta que les escribo, en las cuales, como recordatorio, despierto en ustedes su sincero entendimiento, (2 Pedro 3:1)