Nueva Biblia Latinoamericana
Les ruego, hermanos, háganse como yo, pues yo también me he hecho como ustedes. Ningún agravio me han hecho. (Gálatas 4:12)
Pero saben que fue por causa de una enfermedad física que les prediqué (anuncié) el evangelio la primera vez. (Gálatas 4:13)
Y lo que para ustedes fue una prueba en mi condición física, que no despreciaron ni rechazaron, sino que me recibieron como un ángel de Dios, como a Cristo Jesús mismo . (Gálatas 4:14)
¿Dónde está, pues, aquel sentido de bendición que tuvieron? Pues testigo soy en favor de ustedes de que de ser posible, se hubieran sacado los ojos y me los hubieran dado.
¿Me he vuelto, por tanto, enemigo de ustedes al decirles la verdad? (Gálatas 4:16)
Algunos les tienen celo, no con buena intención, sino que quieren excluirlos a fin de que ustedes muestren celo por ellos. (Gálatas 4:17)
Es bueno mostrar celo con buena intención siempre, y no sólo cuando yo estoy presente con ustedes. (Gálatas 4:18)

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Gálatas 4:15 - Referencia Cruzada

por medio de quien también hemos obtenido entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios. (Romanos 5:2)
Pero que cada uno examine su propia obra, y entonces tendrá motivo para gloriarse solamente con respecto a sí mismo, y no con respecto a otro. (Gálatas 6:4)
En esto conocemos el amor: en que El puso Su vida por nosotros. También nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos. (1 Juan 3:16)
Aquéllos sobre la roca son los que, cuando oyen, reciben la palabra con gozo; pero no tienen raíz profunda; creen por algún tiempo, y en el momento de la tentación sucumben. (Lucas 8:13)
Hijos míos, por quienes de nuevo sufro dolores de parto hasta que Cristo sea formado en ustedes, (Gálatas 4:19)
a fin de que en Cristo Jesús la bendición de Abraham viniera a los Gentiles, para que recibiéramos la promesa del Espíritu mediante la fe. (Gálatas 3:14)
Y el Dios de la esperanza los llene de todo gozo y paz en el creer, para que abunden en esperanza por el poder del Espíritu Santo. (Romanos 15:13)
Porque de él soy testigo de que tiene profundo interés por ustedes y por los que están en Laodicea y en Hierápolis. (Colosenses 4:13)
Teniendo así un gran afecto por ustedes, nos hemos complacido en impartirles no sólo el evangelio de Dios, sino también nuestras propias vidas, pues llegaron a ser muy amados para nosotros. (1 Tesalonicenses 2:8)
Porque yo testifico que según sus posibilidades, y aun más allá de sus posibilidades, dieron de su propia voluntad, (2 Corintios 8:3)
Como también David habla de la bendición que viene sobre el hombre a quien Dios atribuye justicia aparte de las obras: (Romanos 4:6)
Porque yo testifico a su favor de que tienen celo de Dios, pero no conforme a un pleno conocimiento. (Romanos 10:2)
y que los tengan en muy alta estima con amor, por causa de su trabajo. Vivan en paz los unos con los otros. (1 Tesalonicenses 5:13)
Porque desearía yo mismo ser anatema (maldito), separado de Cristo por amor a mis hermanos, mis parientes (los de mi raza) según la carne. (Romanos 9:3)
Pero el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fidelidad, (Gálatas 5:22)