Por tanto, habiendo sido justificados por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo,
(Romanos 5:1)
por medio de quien también hemos obtenido entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios.
(Romanos 5:2)
Y no sólo esto, sino que también nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia (perseverancia);
(Romanos 5:3)
y la paciencia (perseverancia), carácter probado; y el carácter probado, esperanza.
Y la esperanza no desilusiona, porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por medio del Espíritu Santo que nos fue dado.
(Romanos 5:5)
Porque mientras aún éramos débiles, a su tiempo Cristo murió por los impíos.
(Romanos 5:6)
Porque difícilmente habrá alguien que muera por un justo, aunque tal vez alguno se atreva a morir por el bueno.
(Romanos 5:7)
Otras publicaciones relacionadas con "Romanos 5:4":
Romanos 5:4 - Referencia Cruzada
el cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que también nosotros podamos consolar a los que están en cualquier aflicción, dándoles el consuelo con que nosotros mismos somos consolados por Dios.
(2 Corintios 1:4)
Pero David respondió a Saúl: "Su siervo apacentaba las ovejas de su padre, y cuando un león o un oso venía y se llevaba un cordero del rebaño,
(1 Samuel 17:34)
Bienaventurado el hombre que persevera bajo la prueba, porque una vez que ha sido aprobado (ha pasado la prueba), recibirá la corona de la vida que el Señor ha prometido a los que Lo aman.
(Santiago 1:12)
Pero yo esperaré continuamente, Y aún Te alabaré más y más.
(Salmos 71:14)
En mi primera defensa nadie estuvo a mi lado, sino que todos me abandonaron; que no se les tenga en cuenta.
(2 Timoteo 4:16)
Y después de que hayan sufrido un poco de tiempo, el Dios de toda gracia, que los llamó a Su gloria eterna en Cristo, El mismo los perfeccionará, afirmará, fortalecerá, y establecerá.
(1 Pedro 5:10)
Cuando los malhechores vinieron sobre mí para devorar mis carnes, Ellos, mis adversarios y mis enemigos, tropezaron y cayeron.
(Salmos 27:2)
Afligidos en todo, pero no agobiados; perplejos, pero no desesperados;
(2 Corintios 4:8)
Me acuerdo de estas cosas y derramo mi alma dentro de mí; De cómo iba yo con la multitud y la guiaba hasta la casa de Dios, Con voz de alegría y de acción de gracias, con la muchedumbre en fiesta.
(Salmos 42:4)
Cuando llevaron estos reyes a Josué, Josué llamó a todos los hombres de Israel, y dijo a los jefes de los hombres de guerra que habían ido con él: "Acérquense, pongan su pie sobre el cuello de estos reyes." Ellos se acercaron y pusieron los pies sobre sus cuellos.
(Josué 10:24)
Porque todo lo que fue escrito en tiempos pasados, para nuestra enseñanza se escribió, a fin de que por medio de la paciencia (perseverancia) y del consuelo de las Escrituras tengamos esperanza.
(Romanos 15:4)
Y aun en la vejez y las canas, no me desampares, oh Dios, Hasta que anuncie Tu poder a esta generación, Tu poderío a todos los que han de venir.
(Salmos 71:18)
En lo cual ustedes se regocijan grandemente, aunque ahora, por un poco de tiempo si es necesario, sean afligidos con diversas pruebas (tentaciones),
(1 Pedro 1:6)
Somos tratados como desconocidos, pero bien conocidos; como moribundos, pero vivimos; como castigados, pero no condenados a muerte;
(2 Corintios 6:9)