Otro es el que da testimonio de Mí, y Yo sé que el testimonio que da de Mí es verdadero.
(Juan 5:32)
Ustedes han enviado a preguntar a Juan, y él ha dado testimonio de la verdad.
(Juan 5:33)
Pero el testimonio que Yo recibo no es de hombre; pero digo esto para que ustedes sean salvos.
(Juan 5:34)
El era la lámpara que ardía y alumbraba, y ustedes estaban dispuestos a regocijarse por un tiempo en su luz.
Pero el testimonio que Yo tengo es mayor que el de Juan; porque las obras que el Padre Me ha dado para llevar a cabo, las mismas obras que Yo hago, dan testimonio de Mí, de que el Padre Me ha enviado.
(Juan 5:36)
El Padre que Me envió, El ha dado testimonio de Mí. Pero ustedes no han oído jamás Su voz ni han visto Su apariencia.
(Juan 5:37)
Y Su palabra no la tienen morando en ustedes, porque no creen en Aquél que El envió.
(Juan 5:38)
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Juan 5:35 - Referencia Cruzada
porque él será grande delante del Señor. No beberá vino ni licor, y será lleno del Espíritu Santo aun desde el vientre de su madre,
(Lucas 1:15)
Y vienen a ti como viene el pueblo, y se sientan delante de ti como pueblo Mío, oyen tus palabras y no las cumplen sino que siguen los deseos sensuales expresados por su boca, y sus corazones andan tras sus ganancias.
(Ezequiel 33:31)
Este vino como testigo para testificar de la Luz, a fin de que todos creyeran por medio de él.
(Juan 1:7)
Y aquél en quien se sembró la semilla en pedregales, éste es el que oye la palabra y enseguida la recibe con gozo;
(Mateo 13:20)
¿Dónde está, pues, aquel sentido de bendición que tuvieron? Pues testigo soy en favor de ustedes de que de ser posible, se hubieran sacado los ojos y me los hubieran dado.
(Gálatas 4:15)
Y así tenemos la palabra profética más segura, a la cual ustedes hacen bien en prestar atención como a una lámpara que brilla en el lugar oscuro, hasta que el día despunte y el lucero de la mañana aparezca en sus corazones.
(2 Pedro 1:19)
Como resultado de esto muchos de Sus discípulos se apartaron y ya no andaban con El.
(Juan 6:66)
Les digo que entre los nacidos de mujer, no hay nadie mayor que Juan; sin embargo, el más pequeño en el reino de Dios es mayor que él."
(Lucas 7:28)
Mientras ellos (los discípulos de Juan) se iban, Jesús comenzó a hablar a las multitudes acerca de Juan: "¿Qué salieron a ver en el desierto? ¿Una caña sacudida por el viento?
(Mateo 11:7)
Entonces Jerusalén, toda Judea y toda la región alrededor del Jordán, acudían a él,
(Mateo 3:5)
En verdad les digo que entre los nacidos de mujer no se ha levantado nadie mayor que Juan el Bautista; sin embargo, el más pequeño en el reino de los cielos es mayor que él.
(Mateo 11:11)
Y si decimos: 'De los hombres,' tememos a la multitud; porque todos tienen a Juan por profeta."
(Mateo 21:26)
porque Herodes temía a Juan, sabiendo que era un hombre justo y santo, y lo mantenía protegido. Cuando le oía se quedaba muy perplejo, pero le gustaba escucharlo.
(Marcus 6:20)
Y tú, niño, serás llamado profeta del Altísimo; Porque irás DELANTE DEL SEÑOR PARA PREPARAR SUS CAMINOS;
(Lucas 1:76)