Arrepiéntanse, porque el reino de los cielos se ha acercado."
(Mateo 3:2)
Porque este Juan es aquél a quien se refirió el profeta Isaías, cuando dijo: "VOZ DEL QUE CLAMA EN EL DESIERTO: 'PREPAREN EL CAMINO DEL SEÑOR, HAGAN DERECHAS SUS SENDAS.'"
(Mateo 3:3)
Y él, Juan, tenía un vestido de pelo de camello y un cinto de cuero a la cintura; y su comida era de langostas (saltamontes) y miel silvestre.
(Mateo 3:4)
Entonces Jerusalén, toda Judea y toda la región alrededor del Jordán, acudían a él,
y confesando sus pecados, eran bautizados por Juan en el río Jordán.
(Mateo 3:6)
Pero cuando vio que muchos de los Fariseos y Saduceos venían para el bautismo, les dijo: "¡Camada de víboras! ¿Quién les enseñó a huir de la ira que está al venir?
(Mateo 3:7)
Por tanto, den frutos dignos de arrepentimiento;
(Mateo 3:8)
Otras publicaciones relacionadas con "Mateo 3:5":
Mateo 3:5 - Referencia Cruzada
Juan también bautizaba en Enón, cerca de Salim, porque allí había mucha agua; y muchos venían y eran bautizados.
(Juan 3:23)
La Ley y los Profetas se proclamaron hasta Juan; desde entonces se anuncian las buenas nuevas (el evangelio) del reino de Dios, y todos se esfuerzan por entrar en él.
(Lucas 16:16)
El era la lámpara que ardía y alumbraba, y ustedes estaban dispuestos a regocijarse por un tiempo en su luz.
(Juan 5:35)
Acudía a él toda la región de Judea, y toda la gente de Jerusalén (Ciudad de Paz), y confesando sus pecados, eran bautizados por él en el río Jordán.
(Marcus 1:5)
Mientras ellos (los discípulos de Juan) se iban, Jesús comenzó a hablar a las multitudes acerca de Juan: "¿Qué salieron a ver en el desierto? ¿Una caña sacudida por el viento?
(Mateo 11:7)
Por eso, Juan decía a las multitudes que acudían para que él las bautizara: "¡Camada de víboras! ¿Quién les enseñó a huir de la ira que vendrá?
(Lucas 3:7)
Y Lo siguieron grandes multitudes de Galilea, Decápolis, Jerusalén y Judea, y del otro lado del Jordán.
(Mateo 4:25)