Nueva Biblia Latinoamericana
En El estaba (existía) la vida, y la vida era la Luz de los hombres. (Juan 1:4)
La Luz brilla en las tinieblas, y las tinieblas no la comprendieron (no la dominaron). (Juan 1:5)
Vino al mundo un hombre enviado por Dios, cuyo nombre era Juan. (Juan 1:6)
Este vino como testigo para testificar de la Luz, a fin de que todos creyeran por medio de él.
No era él la Luz, sino que vino para dar testimonio de la Luz. (Juan 1:8)
Existía la Luz verdadera que, al venir al mundo, alumbra a todo hombre. (Juan 1:9)
El estaba en el mundo, y el mundo fue hecho por medio de El, y el mundo no Lo conoció. (Juan 1:10)

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En este sermón, el pastor habla sobre la importancia de que la iglesia sea una luz en el mundo, como una ciudad puesta sobre un monte que no puede ser escondida. Se hace referencia a la consagración y el servicio al Señor en la presentación de dos bebés recién nacidos. Además, se habla sobre la importancia de presentar a los bebés ante el Señor y santificarlos para Su uso exclusivo. El mensaje es sobre ser luz en el mundo y no esconder nuestra luz debajo de un almud, mostrando la excelencia del Evangelio en nuestras vidas y no adoptando los valores del mundo. La iglesia tiene la posibilidad de hacer realidad un gran avivamiento por medio de la predicación del Evangelio y debemos activarnos como conquistadores y testigos de la luz de Cristo en nuestro corazón.


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Juan 1:7 - Referencia Cruzada

Este es el testimonio de Juan, cuando los Judíos enviaron sacerdotes y Levitas de Jerusalén (Ciudad de Paz) a preguntarle: "¿Quién eres tú?" (Juan 1:19)
Ustedes han enviado a preguntar a Juan, y él ha dado testimonio de la verdad. (Juan 5:33)
El Señor no se tarda en cumplir Su promesa, según algunos entienden la tardanza, sino que es paciente para con ustedes, no queriendo que nadie perezca, sino que todos vengan al arrepentimiento. (2 Pedro 3:9)
Existía la Luz verdadera que, al venir al mundo, alumbra a todo hombre. (Juan 1:9)
Vinieron a Juan y le dijeron: "Rabí, mira, Aquél que estaba contigo al otro lado del Jordán, de quien diste testimonio, está bautizando y todos van a El." (Juan 3:26)
Pero a todos los que Lo recibieron, les dio el derecho (el poder) de llegar a ser hijos de Dios, es decir, a los que creen en Su nombre, (Juan 1:12)
y sacar a la luz cuál es la dispensación del misterio que por los siglos ha estado oculto en Dios, creador de todas las cosas. (Efesios 3:9)
Porque la gracia de Dios se ha manifestado, trayendo salvación a todos los hombres, (Tito 2:11)
Juan dio testimonio de El y clamó: "Este era del que yo decía: 'El que viene después de mí, es antes de mí (tiene un rango más elevado que yo), porque era primero que yo.'" (Juan 1:15)
Juan también dio testimonio, diciendo: "He visto al Espíritu que descendía del cielo como paloma, y se posó sobre El. (Juan 1:32)
Juan les respondió: "Yo bautizo en agua, pero entre ustedes está Uno a quien ustedes no conocen. (Juan 1:26)
y vio a Jesús que pasaba, y dijo: "Ahí está el Cordero de Dios." (Juan 1:36)
el cual quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al pleno conocimiento de la verdad. (1 Timoteo 2:4)
Y Pablo les dijo: "Juan bautizó con el bautismo de arrepentimiento, diciendo al pueblo que creyeran en Aquél que vendría después de él, es decir, en Jesús." (Hechos 19:4)