Nueva Biblia Latinoamericana
Y los que iban delante lo reprendían para que se callara, pero él gritaba mucho más: "¡Hijo de David, ten misericordia de mí!" (Lucas 18:39)
Jesús se detuvo y ordenó que lo trajeran; y cuando estuvo cerca, le preguntó: (Lucas 18:40)
¿Qué deseas que haga por ti?" "Señor, que recobre la vista," contestó el ciego. (Lucas 18:41)
Jesús entonces le dijo: "Recibe la vista, tu fe te ha sanado."
Al instante recobró la vista y Lo seguía glorificando a Dios. Cuando toda la gente vio aquello, dieron gloria a Dios. (Lucas 18:43)
Cuando Jesús entró en Jericó, pasaba por la ciudad. (Lucas 19:1)
Y un hombre llamado Zaqueo, que era jefe de los recaudadores de impuestos y era rico, (Lucas 19:2)

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Lucas 18:42 - Referencia Cruzada

El envió Su palabra y los sanó Y los libró de la muerte. (Salmos 107:20)
Pero Jesús, volviéndose y viéndola, dijo: "Hija, ten ánimo, tu fe te ha sanado." Y al instante la mujer quedó sana. (Mateo 9:22)
Entonces Jesús le dijo: "Oh mujer, grande es tu fe; que te suceda como deseas." Y su hija quedó sana desde aquel momento. (Mateo 15:28)
Entonces le dijo: "Levántate y vete; tu fe te ha sanado." (Lucas 17:19)
Porque El habló, y fue hecho; El mandó, y todo se confirmó. (Salmos 33:9)
Extendiendo Jesús la mano, lo tocó, diciendo: "Quiero; sé limpio." Y al instante quedó limpio de su lepra. (Mateo 8:3)
Pero Jesús dijo a la mujer: "Tu fe te ha salvado, vete en paz." (Lucas 7:50)
Y El le dijo: "Hija, tu fe te ha sanado; vete en paz." (Lucas 8:48)