Nueva Biblia Latinoamericana
Entonces Jesús se retiró al mar con Sus discípulos, y una gran multitud de Galilea Lo siguió. Y también de Judea, (Marcus 3:7)
de Jerusalén, de Idumea, del otro lado del Jordán, y de los alrededores de Tiro y Sidón, una gran multitud, que al oír todo lo que Jesús hacía, vino a El. (Marcus 3:8)
Y dijo a Sus discípulos que tuvieran lista una barca para El por causa de la multitud, para que no Lo oprimieran; (Marcus 3:9)
porque El había sanado a muchos, de manera que todos los que tenían aflicciones, para tocar a Jesús, se echaban sobre El.
Y siempre que los espíritus inmundos veían a Jesús, caían delante de El y gritaban: "Tú eres el Hijo de Dios." (Marcus 3:11)
Pero El les advertía con insistencia que no revelaran Su identidad. (Marcus 3:12)
Después Jesús subió al monte, llamó a los que El quiso, y ellos vinieron a El. (Marcus 3:13)

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Marcus 3:10 - Referencia Cruzada

Y una mujer que había estado sufriendo de flujo de sangre por doce años, se Le acercó por detrás y tocó el borde de Su manto; (Mateo 9:20)
Y Le rogaban que les dejara tocar siquiera el borde de Su manto; y todos los que lo tocaban quedaban curados. (Mateo 14:36)
Cuando ella oyó hablar de Jesús, se llegó a El por detrás entre la multitud y tocó Su manto. (Marcus 5:27)
PORQUE EL SEÑOR AL QUE AMA, DISCIPLINA, Y AZOTA A TODO EL QUE RECIBE POR HIJO." (Hebreos 12:6)
a tal punto que aun sacaban a los enfermos a las calles y los tendían en lechos y camillas, para que al pasar Pedro, siquiera su sombra cayera sobre alguno de ellos. (Hechos 5:15)
Dios hacía milagros extraordinarios por mano de Pablo, (Hechos 19:11)
Dondequiera que El entraba en aldeas, ciudades o campos, ponían a los enfermos en las plazas, y Le rogaban que les permitiera tocar siquiera el borde de Su manto; y todos los que lo tocaban quedaban curados. (Marcus 6:56)
Cuando Jesús desembarcó, vio una gran multitud, y tuvo compasión de ellos y sanó a sus enfermos. (Mateo 14:14)
Pero mientras la carne estaba aún entre sus dientes, antes que la masticaran, la ira del SEÑOR se encendió contra el pueblo, y el SEÑOR hirió al pueblo con una plaga muy mala. (Números 11:33)
Y Jesús iba por toda Galilea, enseñando en sus sinagogas, proclamando el evangelio (las buenas nuevas) del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo. (Mateo 4:23)
Hija, tu fe te ha sanado," le dijo Jesús; "vete en paz y queda sana de tu aflicción." (Marcus 5:34)
Y el siervo de cierto centurión, a quien éste apreciaba mucho, estaba enfermo y a punto de morir. (Lucas 7:2)
Pero Jesús, sabiéndolo, se retiró de allí. Y muchos Lo siguieron, y los sanó a todos. (Mateo 12:15)
Pero el SEÑOR hirió a Faraón y a su casa con grandes plagas por causa de Sarai, mujer de Abram. (Génesis 12:17)