Nueva Biblia Latinoamericana
Y todo el pueblo respondió a una, y dijeron: "Haremos todo lo que el SEÑOR ha dicho." Y Moisés llevó al SEÑOR las palabras del pueblo. (Éxodo 19:8)
Y el SEÑOR dijo a Moisés: "Yo vendré a ti en una densa nube, para que el pueblo oiga cuando Yo hable contigo y también te crean para siempre." Entonces Moisés comunicó al pueblo las palabras del SEÑOR. (Éxodo 19:9)
El SEÑOR dijo también a Moisés: "Ve al pueblo y conságralos hoy y mañana, y que laven sus vestidos. (Éxodo 19:10)
Que estén preparados para el tercer día, porque al tercer día el SEÑOR descenderá a la vista de todo el pueblo sobre el Monte Sinaí.
Pondrás límites alrededor para el pueblo, y dirás: 'De ningún modo suban al monte o toquen su límite. Cualquiera que toque el monte, ciertamente morirá. (Éxodo 19:12)
Ninguna mano lo tocará, sino que morirá apedreado o a flechazos. Sea animal o sea hombre, no vivirá.' Cuando suene largamente la bocina ellos subirán al monte." (Éxodo 19:13)
Y Moisés bajó del monte al pueblo, y santificó al pueblo. Después ellos lavaron sus vestidos. (Éxodo 19:14)

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Éxodo 19:11 - Referencia Cruzada

El SEÑOR descendió a la cumbre del Monte Sinaí. Entonces el SEÑOR llamó a Moisés a la cumbre del monte, y Moisés subió. (Éxodo 19:20)
Dijo: "El SEÑOR vino del Sinaí Esclareciéndoles desde Seir; Resplandeció desde el Monte Parán, Y vino de en medio de diez millares de santos; A Su diestra había fulgor centelleante para ellos. (Deuteronomio 33:2)
Nadie ha subido al cielo, sino Aquél que bajó del cielo, es decir, el Hijo del Hombre que está en el cielo. (Juan 3:13)
También inclinó los cielos, y descendió Con densas tinieblas debajo de Sus pies. (Salmos 18:9)
Porque he descendido del cielo, no para hacer Mi voluntad, sino la voluntad del que Me envió. (Juan 6:38)
¡Oh, si rasgaras los cielos y descendieras! Si los montes se estremecieran ante Tu presencia (Isaías 64:1)
Todo el Monte Sinaí humeaba, porque el SEÑOR había descendido sobre él en fuego. El humo subía como el humo de un horno, y todo el monte se estremecía con violencia. (Éxodo 19:18)
Entonces descenderé y hablaré contigo allí, y tomaré del Espíritu que está sobre ti y lo pondré sobre ellos, y llevarán contigo la carga del pueblo para que no la lleves tú solo. (Números 11:17)
Dios viene de Temán, Y el Santo, del Monte Parán. (Selah) Su esplendor cubre los cielos, Y de Su alabanza está llena la tierra. (Habacuc 3:3)
Y aconteció que al tercer día, cuando llegó la mañana, hubo truenos y relámpagos y una densa nube sobre el monte y un sonido tan fuerte de trompeta, que hizo temblar a todo el pueblo que estaba en el campamento. (Éxodo 19:16)
Oh SEÑOR, inclina Tus cielos y desciende; Toca los montes para que humeen. (Salmos 144:5)
Así que he descendido para librarlos de mano de los Egipcios, y para sacarlos de aquella tierra a una tierra buena y espaciosa, a una tierra que mana leche y miel, al lugar de los Cananeos, de los Hititas, de los Amorreos, de los Ferezeos, de los Heveos y de los Jebuseos. (Éxodo 3:8)
El SEÑOR descendió en la nube y estuvo allí con él, mientras éste invocaba el nombre del SEÑOR. (Éxodo 34:5)