¡Ay, nación pecadora, Pueblo cargado de iniquidad, Generación de malvados, Hijos corrompidos! Han abandonado al SEÑOR, Han despreciado al Santo de Israel, Se han apartado de El.
(Isaías 1:4)
¿Dónde más serán castigados? ¿Continuarán en rebelión? Toda cabeza está enferma, Y todo corazón desfallecido.
(Isaías 1:5)
Desde la planta del pie hasta la cabeza No hay nada sano en él, Sino golpes, verdugones y heridas recientes; No han sido curadas, ni vendadas, Ni suavizadas con aceite.
(Isaías 1:6)
La tierra de ustedes está desolada, Sus ciudades quemadas por el fuego, Su suelo lo devoran los extraños delante de ustedes, Y es una desolación, como destruida por extraños.
La hija de Sion ha quedado como cobertizo en una viña, Como choza en un pepinar, como ciudad sitiada.
(Isaías 1:8)
Si el SEÑOR de los ejércitos No nos hubiera dejado algunos sobrevivientes, Seríamos como Sodoma, Y semejantes a Gomorra.
(Isaías 1:9)
Oigan la palabra del SEÑOR, Gobernantes de Sodoma. Escuchen la instrucción de nuestro Dios, Pueblo de Gomorra:
(Isaías 1:10)
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Isaías 1:7 - Referencia Cruzada
por tanto servirás a tus enemigos, los cuales el SEÑOR enviará contra ti: en hambre, en sed, en desnudez y en escasez de todas las cosas. El pondrá yugo de hierro sobre tu cuello hasta que te haya destruido.
(Deuteronomio 28:48)
Ahora pues, dejen que les diga Lo que Yo he de hacer a Mi viña: "Quitaré su vallado y será consumida; Derribaré su muro y será pisoteada.
(Isaías 5:5)
La tierra fértil en salinas, Por la maldad de los que moran en ella.
(Salmos 107:34)
Entonces pastarán los corderos como en praderas propias, Y en los lugares desolados de los ricos, extranjeros comerán.
(Isaías 5:17)
Cuando son disminuidos y abatidos Por la opresión, la calamidad y la aflicción,
(Salmos 107:39)
Entonces la tierra gozará de sus días de reposo durante todos los días de su desolación, mientras que ustedes habiten en la tierra de sus enemigos; entonces descansará la tierra y gozará de sus días de reposo.
(Levítico 26:34)
Porque toda bota que calza el guerrero en el fragor de la batalla, Y el manto revolcado en sangre, serán para quemar, combustible para el fuego.
(Isaías 9:5)
Devoran extranjeros su fuerza, Y él no lo sabe; También tiene cabellos canos, Y él no lo sabe.
(Oseas 7:9)
Contra él rugieron los leoncillos, Fuertemente rugieron, Y han hecho de su tierra una desolación; Sus ciudades están quemadas, sin habitantes.
(Jeremías 2:15)
Un pueblo que no conoces comerá el producto de tu suelo y de todo tu trabajo, y no serás más que un pueblo oprimido y quebrantado todos los días.
(Deuteronomio 28:33)
Sé precavida, oh Jerusalén, No sea que mi alma se aleje de ti; No sea que Yo te convierta en desolación, En tierra despoblada."
(Jeremías 6:8)
Los torrentes de Edom se convertirán en brea, Su polvo en azufre, Y su tierra será brea ardiente.
(Isaías 34:9)
El extranjero que esté en medio de ti se elevará sobre ti cada vez más alto, pero tú descenderás cada vez más bajo.
(Deuteronomio 28:43)
Convertiré en sequedal los canales del Nilo Y venderé la tierra en manos de malvados. Desolaré la tierra Y cuanto hay en ella por mano de extraños. Yo, el SEÑOR, he hablado.'"
(Ezequiel 30:12)
Por lo cual el SEÑOR su Dios lo entregó en manos del rey de los Arameos, que lo derrotaron, tomaron de él gran número de cautivos y los llevaron a Damasco. Y también él fue entregado en manos del rey de Israel, el cual lo hirió con gran mortandad.
(2 Crónicas 28:5)
A mis oídos el SEÑOR de los ejércitos ha jurado: "Ciertamente muchas casas serán desoladas, Grandes y hermosas, pero sin moradores.
(Isaías 5:9)
Porque siembran viento, Y recogerán tempestades. El trigo no tiene espigas, No da grano, Y si lo diera, se lo tragarían los extraños.
(Oseas 8:7)
Nuestra heredad ha pasado a extraños, Nuestras casas a extranjeros.
(Lamentaciones 5:2)
En aquel tiempo el rey Acaz envió a pedir ayuda a los reyes de Asiria.
(2 Crónicas 28:16)
Derribada está la ciudad del caos, Toda casa está cerrada para que no entre nadie.
(Isaías 24:10)
Entonces dije: "¿Hasta cuándo, Señor?" Y El respondió: "Hasta que las ciudades estén destruidas y sin habitantes, Las casas sin gente, Y la tierra completamente desolada;
(Isaías 6:11)