Voy a salir de tu presencia," le contestó Moisés "y rogaré al SEÑOR que los enjambres de insectos se alejen mañana de Faraón, de sus siervos y de su pueblo. Pero que Faraón no vuelva a obrar con engaño, no dejando ir al pueblo a ofrecer sacrificios al SEÑOR."
(Éxodo 8:29)Salió Moisés de la presencia de Faraón y oró al SEÑOR.
(Éxodo 8:30)Y el SEÑOR hizo como Moisés Le pidió, y quitó los enjambres de insectos de Faraón, de sus siervos y de su pueblo. No quedó ni uno solo.
(Éxodo 8:31)Pero Faraón endureció su corazón también esta vez y no dejó salir al pueblo.
Entonces el SEÑOR dijo a Moisés: "Ve a Faraón y dile: 'Así dice el SEÑOR, el Dios de los Hebreos: "Deja ir a Mi pueblo para que Me sirva.
(Éxodo 9:1)Porque si te niegas a dejarlos ir y los sigues deteniendo,
(Éxodo 9:2)entonces la mano del SEÑOR vendrá con gravísima pestilencia sobre tus ganados que están en el campo: sobre los caballos, sobre los asnos, sobre los camellos, sobre las vacas y sobre las ovejas.
(Éxodo 9:3)Otras publicaciones relacionadas con "Éxodo 8:32":
Éxodo 8:32 - Referencia Cruzada
diciendo: 'VE A ESTE PUEBLO Y DI: "AL OIR OIRAN, Y NO ENTENDERAN; Y VIENDO VERAN, Y NO PERCIBIRAN;
(Hechos 28:26)Entonces Faraón llamó a Moisés y a Aarón, y dijo: "Rueguen al SEÑOR para que quite las ranas de mí y de mi pueblo, y yo dejaré ir al pueblo para que ofrezca sacrificios al SEÑOR."
(Éxodo 8:8)Pero por causa de tu terquedad y de tu corazón no arrepentido, estás acumulando ira para ti en el día de la ira y de la revelación del justo juicio de Dios.
(Romanos 2:5)Y el SEÑOR dijo a Moisés: "Cuando vuelvas a Egipto, mira que hagas delante de Faraón todas las maravillas que he puesto en tu mano. Pero Yo endureceré su corazón de modo que no dejará ir al pueblo.
(Éxodo 4:21)Que nadie diga cuando es tentado: "Soy tentado por Dios." Porque Dios no puede ser tentado por el mal y El mismo no tienta a nadie.
(Santiago 1:13)Sin embargo el corazón de Faraón se endureció y no los escuchó, tal como el SEÑOR había dicho.
(Éxodo 7:13)¿Por qué, oh SEÑOR, nos haces desviar de Tus caminos Y endureces nuestro corazón a Tu temor? Vuélvete por amor de Tus siervos, las tribus de Tu heredad.
(Isaías 63:17)Pero al ver Faraón que había alivio, endureció su corazón y no los escuchó, tal como el SEÑOR había dicho.
(Éxodo 8:15)