Nueva Biblia Latinoamericana
Moisés se fue y volvió a casa de su suegro Jetro, y le dijo: "Te ruego que me dejes ir para volver a mis hermanos que están en Egipto, y ver si aún viven." "Ve en paz," le contestó Jetro. (Éxodo 4:18)
Y el SEÑOR dijo a Moisés en Madián: "Ve, vuelve a Egipto, porque han muerto todos los hombres que buscaban tu vida." (Éxodo 4:19)
Moisés tomó a su mujer y a sus hijos, los montó sobre un asno y volvió a la tierra de Egipto. Moisés tomó también la vara de Dios en su mano. (Éxodo 4:20)
Y el SEÑOR dijo a Moisés: "Cuando vuelvas a Egipto, mira que hagas delante de Faraón todas las maravillas que he puesto en tu mano. Pero Yo endureceré su corazón de modo que no dejará ir al pueblo.
Entonces dirás a Faraón: 'Así dice el SEÑOR: "Israel es Mi hijo, Mi primogénito. (Éxodo 4:22)
Y te he dicho: 'Deja ir a Mi hijo para que Me sirva,' pero te has negado a dejarlo ir. Por tanto mataré a tu hijo, a tu primogénito."'" (Éxodo 4:23)
Y aconteció que en una posada en el camino, el SEÑOR le salió al encuentro a Moisés y quiso matarlo. (Éxodo 4:24)

Otras publicaciones relacionadas con "Éxodo 4:21":

Mercedes López-Miranda
Hazlo como Moisés y entrega tu vara a Dios
Artículo sobre el llamado de Dios y el servicio a través del ejemplo de Moisés


Claudio Yeme
Obediencia, intercesión y confianza en Dios
El autor habla sobre las armas espirituales que todo creyente tiene a su alcance para luchar en el espíritu y enfatiza la importancia de la obediencia a la palabra de Dios, el poder de la oración de intercesión y la confianza que el creyente puede tener en la palabra de Dios. Utiliza la historia de Moisés y la salida de Israel de Egipto como ejemplo para enseñar 3 verdades.


Éxodo 4:21 - Referencia Cruzada

Desde Aroer, que está a la orilla del Valle del Arnón, y desde la ciudad que está en el valle, aun hasta Galaad, no hubo ciudad inaccesible para nosotros; el SEÑOR nuestro Dios nos las entregó todas. (Deuteronomio 2:36)
Y el SEÑOR endureció el corazón de Faraón y no los escuchó, tal como el SEÑOR había dicho a Moisés. (Éxodo 9:12)
Entonces el SEÑOR dijo: "Mi Espíritu no luchará para siempre con el hombre, porque ciertamente él es carne. Serán, pues, sus días 120 años." (Génesis 6:3)
Pero Sehón, rey de Hesbón, no quiso dejarnos pasar por su tierra porque el SEÑOR tu Dios endureció su espíritu e hizo obstinado su corazón, a fin de entregarlo en tus manos, como lo está hoy. (Deuteronomio 2:30)
Pero Yo extenderé Mi mano y heriré a Egipto con todos los prodigios (milagros) que haré en medio de él, y después de esto, los dejará ir. (Éxodo 3:20)
Les cambió el corazón para que odiaran a Su pueblo, Para que obraran astutamente contra Sus siervos. (Salmos 105:25)
Y se endureció el corazón de Faraón y no dejó ir a los Israelitas, tal como el SEÑOR había dicho por medio de Moisés. (Éxodo 9:35)
Pero Yo endureceré el corazón de Faraón, y él los perseguirá. Y seré glorificado por medio de Faraón y de todo su ejército, y sabrán los Egipcios que Yo soy el SEÑOR." Y así lo hicieron. (Éxodo 14:4)
Pero Yo endureceré el corazón de Faraón para multiplicar Mis señales y Mis prodigios (milagros) en la tierra de Egipto. (Éxodo 7:3)
Haz insensible el corazón de este pueblo, Endurece sus oídos, Y nubla sus ojos, No sea que vea con sus ojos, Y oiga con sus oídos, Y entienda con su corazón, Y se arrepienta y sea curado." (Isaías 6:10)
tal como está escrito: "DIOS LES DIO UN ESPIRITU EMBOTADO, OJOS CON QUE NO VEN Y OIDOS CON QUE NO OYEN, HASTA EL DIA DE HOY." (Romanos 11:8)
y con todo engaño de iniquidad para los que se pierden, porque no recibieron el amor de la verdad para ser salvos. (2 Tesalonicenses 2:10)
Y así como ellos no tuvieron a bien reconocer a Dios, Dios los entregó a una mente depravada, para que hicieran las cosas que no convienen. (Romanos 1:28)
Pero el SEÑOR endureció el corazón de Faraón, y éste no dejó ir a los Israelitas. (Éxodo 10:20)
y, "PIEDRA DE TROPIEZO Y ROCA DE ESCANDALO." Pues ellos tropiezan porque son desobedientes a la palabra, y para ello estaban también destinados. (1 Pedro 2:8)
Sin embargo el corazón de Faraón se endureció y no los escuchó, tal como el SEÑOR había dicho. (Éxodo 7:13)
¿Por qué, oh SEÑOR, nos haces desviar de Tus caminos Y endureces nuestro corazón a Tu temor? Vuélvete por amor de Tus siervos, las tribus de Tu heredad. (Isaías 63:17)
Para unos, olor de muerte para muerte, y para otros, olor de vida para vida. Y para estas cosas ¿quién está capacitado? (¿quién es suficiente?) (2 Corintios 2:16)
Porque fue la intención del SEÑOR endurecer el corazón de ellos, para que se enfrentaran en batalla con Israel, a fin de que fueran destruidos por completo, sin que tuviera piedad de ellos y los exterminara, tal como el SEÑOR había ordenado a Moisés. (Josué 11:20)
Así que Dios tiene misericordia, del que quiere y al que quiere endurece. (Romanos 9:18)
El SEÑOR le preguntó: '¿Cómo?' Y él respondió: 'Saldré y seré espíritu de mentira en boca de todos sus profetas.' Entonces El dijo: 'Lo persuadirás y también prevalecerás. Ve y hazlo así.' (1 Reyes 22:22)
EL HA CEGADO SUS OJOS Y ENDURECIDO SU CORAZON, PARA QUE NO VEAN CON LOS OJOS Y ENTIENDAN CON EL CORAZON, Y SE CONVIERTAN Y YO LOS SANE." (Juan 12:40)
El SEÑOR endureció el corazón de Faraón, rey de Egipto, y éste persiguió a los Israelitas, pero éstos habían salido con mano fuerte. (Éxodo 14:8)