La necedad está ligada al corazón del niño, Pero la vara de la disciplina lo alejará de ella.
(Proverbios 22:15)
El que oprime al pobre para engrandecerse, O da al rico, sólo llegará a la pobreza.
(Proverbios 22:16)
Inclina tu oído y oye las palabras de los sabios, Y aplica tu corazón a mi conocimiento;
(Proverbios 22:17)
Porque te será agradable si las guardas dentro de ti, Para que estén listas en tus labios.
Para que tu confianza esté en el SEÑOR, Te he instruido hoy a ti también.
(Proverbios 22:19)
¿No te he escrito cosas excelentes De consejo y conocimiento,
(Proverbios 22:20)
Para hacerte saber la certeza de las palabras de verdad A fin de que respondas correctamente al que te ha enviado?
(Proverbios 22:21)
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Proverbios 22:18 - Referencia Cruzada
Pues los labios del sacerdote deben guardar la sabiduría, y los hombres deben buscar la instrucción de su boca, porque él es el mensajero del SEÑOR de los ejércitos.
(Malaquías 2:7)
Deseables más que el oro; sí, más que mucho oro fino, Más dulces que la miel y que el destilar del panal.
(Salmos 19:10)
Tus testimonios he tomado como herencia para siempre, Porque son el gozo de mi corazón.
(Salmos 119:111)
Me regocijo en Tu palabra, Como quien halla un gran botín.
(Salmos 119:162)
El que cree en Mí, como ha dicho la Escritura: 'De lo más profundo de su ser brotarán ríos de agua viva.'"
(Juan 7:38)
Come miel, hijo mío, porque es buena; Sí, la miel del panal es dulce a tu paladar.
(Proverbios 24:13)
Porque la sabiduría entrará en tu corazón, Y el conocimiento será grato a tu alma;
(Proverbios 2:10)
Porque estoy lleno de palabras; Dentro de mí el espíritu me constriñe.
(Job 32:18)
En los labios del entendido se halla sabiduría, Pero la vara es para las espaldas del falto de entendimiento.
(Proverbios 10:13)
Los labios de los sabios esparcen conocimiento, Pero no así el corazón de los necios.
(Proverbios 15:7)
El sabio de corazón será llamado prudente, Y la dulzura de palabras aumenta la persuasión.
(Proverbios 16:21)
He contado con mis labios De todas las ordenanzas de Tu boca.
(Salmos 119:13)
Cuando se presentaban Tus palabras, yo las comía; Tus palabras eran para mí el gozo y la alegría de mi corazón, Porque se me llamaba por Tu nombre, Oh SEÑOR, Dios de los ejércitos.
(Jeremías 15:16)
¡Cuán dulces son a mi paladar Tus palabras!, Sí, más que la miel a mi boca.
(Salmos 119:103)
Como manzanas de oro en engastes de plata Es la palabra dicha a su tiempo.
(Proverbios 25:11)
Que profieran mis labios alabanzas, Pues Tú me enseñas Tus estatutos.
(Salmos 119:171)
Los labios del justo apacientan a muchos, Pero los necios mueren por falta de entendimiento.
(Proverbios 10:21)
Escuchen, porque hablaré cosas excelentes, Y con el abrir de mis labios rectitud.
(Proverbios 8:6)
Por tanto, ofrezcamos continuamente mediante El, sacrificio de alabanza a Dios, es decir, el fruto de labios que confiesan (alaban) Su nombre.
(Hebreos 13:15)
Sus caminos son caminos agradables Y todas sus sendas, paz.
(Proverbios 3:17)