Nueva Biblia Latinoamericana
Es como el óleo precioso sobre la cabeza, El cual desciende sobre la barba, La barba de Aarón, Que desciende hasta el borde de sus vestiduras. (Salmos 133:2)
Es como el rocío de Hermón, Que desciende sobre los montes de Sion; Porque allí mandó el SEÑOR la bendición, la vida para siempre. (Salmos 133:3)
Cántico de ascenso gradual. Bendigan al SEÑOR todos los siervos del SEÑOR, Los que sirven por la noche en la casa del SEÑOR. (Salmos 134:1)
Alcen sus manos al santuario Y bendigan al SEÑOR.
Desde Sion te bendiga el SEÑOR, Que hizo los cielos y la tierra. (Salmos 134:3)
¡Aleluya! Alaben el nombre del SEÑOR; Alábenlo, siervos del SEÑOR, (Salmos 135:1)
Los que están en la casa del SEÑOR, En los atrios de la casa de nuestro Dios. (Salmos 135:2)

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Salmos 134:2 - Referencia Cruzada

Así Te bendeciré mientras viva, En Tu nombre alzaré mis manos. (Salmos 63:4)
Levántate, da voces en la noche Al comenzar las vigilias. Derrama como agua tu corazón Ante la presencia del Señor. Alza hacia El tus manos Por la vida de tus pequeños, Que desfallecen de hambre En las esquinas de todas las calles." (Lamentaciones 2:19)
Escucha la voz de mis súplicas cuando a Ti pido auxilio; Cuando levanto mis manos hacia el Lugar Santísimo de Tu santuario. (Salmos 28:2)
Alcemos nuestro corazón en nuestras manos Hacia Dios en los cielos. (Lamentaciones 3:41)
Por tanto, quiero que en todo lugar los hombres oren levantando manos santas, sin ira ni discusiones. (1 Timoteo 2:8)
Lavaré en inocencia mis manos, Y andaré alrededor de Tu altar, oh SEÑOR, (Salmos 26:6)
Así Te contemplaba en el santuario, Para ver Tu poder y Tu gloria. (Salmos 63:2)
Sea puesta mi oración delante de Ti como incienso, El alzar de mis manos como la ofrenda de la tarde. (Salmos 141:2)