Nueva Biblia Latinoamericana
Venga a mí Tu compasión, para que viva, Porque Tu ley es mi deleite. (Salmos 119:77)
Sean avergonzados los soberbios, porque me agravian con mentira; Pero yo en Tus preceptos meditaré. (Salmos 119:78)
Vuélvanse a mí los que Te temen Y conocen Tus testimonios. (Salmos 119:79)
Sea íntegro mi corazón en Tus estatutos, Para que yo no sea avergonzado.
Caf. Mi alma desfallece por Tu salvación; En Tu palabra espero. (Salmos 119:81)
Mis ojos desfallecen esperando Tu palabra, Mientras digo: ¿Cuándo me consolarás? (Salmos 119:82)
Aunque he llegado a ser como odre al humo, No me olvido de Tus estatutos. (Salmos 119:83)

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Salmos 119:80 - Referencia Cruzada

El SEÑOR tu Dios te manda hoy que cumplas estos estatutos y ordenanzas. Cuidarás, pues, de cumplirlos con todo tu corazón y con toda tu alma. (Deuteronomio 26:16)
Dios mío, en Ti confío; No sea yo avergonzado, Que no se regocijen sobre mí mis enemigos. (Salmos 25:2)
Jesús vio venir a Natanael y dijo de él: "Ahí tienen a un verdadero Israelita en quien no hay engaño." (Juan 1:47)
Pero los lugares altos no fueron quitados de Israel; sin embargo, el corazón de Asa fue intachable todos sus días. (2 Crónicas 15:17)
Amasías hizo lo recto ante los ojos del SEÑOR, aunque no de todo corazón. (2 Crónicas 25:2)
Con toda diligencia guarda tu corazón, Porque de él brotan los manantiales de la vida. (Proverbios 4:23)
Los sacaré de en medio de la ciudad, los entregaré en manos de extraños y traeré juicios contra ustedes. (Ezequiel 11:9)
¡Cuán bienaventurado es el hombre a quien el SEÑOR no culpa de iniquidad, Y en cuyo espíritu no hay engaño! (Salmos 32:2)
Porque nuestra satisfacción es ésta: el testimonio de nuestra conciencia que en la santidad y en la sinceridad que viene de Dios, no en sabiduría carnal sino en la gracia de Dios, nos hemos conducido en el mundo y especialmente hacia ustedes. (2 Corintios 1:12)
Entonces no seré avergonzado, Al considerar todos Tus mandamientos. (Salmos 119:6)
La integridad y la rectitud me preserven, Porque en Ti espero. (Salmos 25:21)
Roboam hizo lo malo porque no dispuso su corazón para buscar al SEÑOR. (2 Crónicas 12:14)
Así hizo Ezequías por todo Judá; y él hizo lo bueno, lo recto y lo verdadero delante del SEÑOR su Dios. (2 Crónicas 31:20)
Y ahora, hijos, permanezcan en El, para que cuando se manifieste, tengamos confianza y no nos apartemos de El avergonzados en Su venida. (1 Juan 2:28)