Padre de los huérfanos y defensor de las viudas Es Dios en Su santa morada.
(Salmos 68:5)
Dios prepara un hogar para los solitarios; Conduce a los cautivos a prosperidad; Sólo los rebeldes habitan en una tierra seca.
(Salmos 68:6)
Oh Dios, cuando saliste al frente de Tu pueblo, Cuando marchaste por el desierto, (Selah)
(Salmos 68:7)
Tembló la tierra; También se derramaron los cielos ante la presencia de Dios; El Sinaí mismo tembló delante de Dios, el Dios de Israel.
Tú esparciste lluvia abundante, oh Dios, Tú fortaleciste Tu heredad cuando estaba extenuada.
(Salmos 68:9)
Los de Tu pueblo se establecieron en ella; En Tu bondad, oh Dios, proveíste para el pobre.
(Salmos 68:10)
El Señor da la palabra; Las mujeres que anuncian las buenas nuevas son gran multitud:
(Salmos 68:11)
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Salmos 68:8 - Referencia Cruzada
Todo el Monte Sinaí humeaba, porque el SEÑOR había descendido sobre él en fuego. El humo subía como el humo de un horno, y todo el monte se estremecía con violencia.
(Éxodo 19:18)
Imponente eres, oh Dios, desde Tu santuario. El Dios mismo de Israel da fortaleza y poder al pueblo. ¡Bendito sea Dios!
(Salmos 68:35)
Y cuando ustedes oyeron la voz de en medio de las tinieblas, mientras el monte ardía con fuego, se acercaron a mí, todos los jefes de sus tribus y sus ancianos,
(Deuteronomio 5:23)
Bendito sea el SEÑOR, Dios de Israel, Desde la eternidad hasta la eternidad. Amén y amén.
(Salmos 41:13)
Te daré los tesoros ocultos, Y las riquezas de los lugares secretos, Para que sepas que soy Yo, El SEÑOR, Dios de Israel, el que te llama por tu nombre.
(Isaías 45:3)
La voz de Tu trueno estaba en el torbellino, Los relámpagos iluminaron al mundo, La tierra se estremeció y tembló.
(Salmos 77:18)
Su voz hizo temblar entonces la tierra, pero ahora El ha prometido, diciendo: "AUN UNA VEZ MAS, YO HARE TEMBLAR NO SOLO LA TIERRA, SINO TAMBIEN EL CIELO."
(Hebreos 12:26)
Y aconteció que al tercer día, cuando llegó la mañana, hubo truenos y relámpagos y una densa nube sobre el monte y un sonido tan fuerte de trompeta, que hizo temblar a todo el pueblo que estaba en el campamento.
(Éxodo 19:16)
Saliste para salvar a Tu pueblo, Para salvar a Tu ungido. Destrozaste la cabeza de la casa del impío, Descubriéndolo de arriba abajo. (Selah)
(Habacuc 3:13)
Tiembla, oh tierra, ante la presencia del Señor, Ante la presencia del Dios de Jacob,
(Salmos 114:7)
¡Oh, si rasgaras los cielos y descendieras! Si los montes se estremecieran ante Tu presencia
(Isaías 64:1)
Cuando hiciste cosas terribles que no esperábamos, Y descendiste, los montes se estremecieron ante Tu presencia.
(Isaías 64:3)
SEÑOR, cuando saliste de Seir, Cuando marchaste del campo de Edom, La tierra tembló, también cayeron gotas del cielo, Y las nubes destilaron agua.
(Jueces 5:4)
El templo de Dios que está en el cielo fue abierto; y el arca de Su pacto se veía en Su templo, y hubo relámpagos, voces (ruidos) y truenos, y un terremoto y una fuerte granizada.
(Apocalipsis 11:19)