Nueva Biblia Latinoamericana
Sepan, pues, que el SEÑOR ha apartado al piadoso para sí; El SEÑOR oye cuando a El clamo. (Salmos 4:3)
Tiemblen, y no pequen; Mediten en su corazón sobre su lecho, y callen. (Selah) (Salmos 4:4)
Ofrezcan sacrificios de justicia, Y confíen en el SEÑOR. (Salmos 4:5)
Muchos dicen: "¿Quién nos mostrará el bien?" ¡Alza, oh SEÑOR, sobre nosotros la luz de Tu rostro!
Alegría pusiste en mi corazón, Mayor que la de ellos cuando abundan su grano y su vino nuevo. (Salmos 4:7)
En paz me acostaré y así también dormiré, Porque sólo Tú, SEÑOR, me haces vivir seguro. (Salmos 4:8)
Para el director del coro; para acompañamiento de flauta. Salmo de David. Escucha mis palabras, oh SEÑOR; Considera mi lamento. (Salmos 5:1)

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Salmos 4:6 - Referencia Cruzada

¿Por qué te desesperas, alma mía, Y por qué te turbas dentro de mí? Espera en Dios, pues he de alabarlo otra vez Por la salvación de Su presencia. (Salmos 42:5)
No temas cuando alguien se enriquece, Cuando la gloria de su casa aumenta; (Salmos 49:16)
¡Cuán bienaventurado es el pueblo que sabe lo que es la voz de júbilo! Andan, SEÑOR, a la luz de Tu rostro. (Salmos 89:15)
Haz resplandecer Tu rostro sobre tu siervo, Y enséñame Tus estatutos. (Salmos 119:135)
Oh SEÑOR, Dios de los ejércitos, restáuranos; Haz resplandecer Tu rostro sobre nosotros y seremos salvos. (Salmos 80:19)
Para el director del coro; con instrumentos de cuerda. Salmo. Cántico. Dios tenga piedad de nosotros y nos bendiga, Y haga resplandecer Su rostro sobre nosotros, (Selah) (Salmos 67:1)
Oh Dios de los ejércitos, restáuranos; Haz resplandecer Tu rostro sobre nosotros, y seremos salvos. (Salmos 80:7)
Pues no fue por su espada que tomaron posesión de la tierra, Ni fue su brazo el que los salvó, Sino Tu diestra y Tu brazo, y la luz de Tu presencia, Porque Te complaciste en ellos. (Salmos 44:3)
Había cierto hombre rico que se vestía de púrpura y lino fino, celebrando cada día fiestas con esplendidez. (Lucas 16:19)
Consideré en mi corazón estimular mi cuerpo con el vino, mientras mi corazón me guiaba con sabiduría, y echar mano de la insensatez, hasta que pudiera ver qué hay de bueno bajo el cielo que los hijos de los hombres hacen en los contados días de su vida. (Eclesiastés 2:3)
Sí, como una sombra anda el hombre; Ciertamente en vano se afana; Acumula riquezas, y no sabe quién las recogerá. (Salmos 39:6)
Y diré a mi alma: alma, tienes muchos bienes depositados para muchos años; descansa, come, bebe, diviértete.' (Lucas 12:19)
¡Oigan ahora, ricos! Lloren y aúllen por las miserias que vienen sobre ustedes. (Santiago 5:1)
Oigan ahora, ustedes que dicen: "Hoy o mañana iremos a tal o cual ciudad y pasaremos allá un año, haremos negocio y tendremos ganancia." (Santiago 4:13)
¿Por qué gastan dinero en lo que no es pan, Y su salario en lo que no sacia? Escúchenme atentamente, y coman lo que es bueno, Y se deleitará su alma en la abundancia. (Isaías 55:2)
Para el director del coro; según la tonada "A los Lirios"; Testimonio. Salmo de Asaf. Presta oído, oh Pastor de Israel; Tú que guías a José como un rebaño; Tú que estás sentado más alto que los querubines; ¡resplandece! (Salmos 80:1)
El SEÑOR alce sobre ti Su rostro, Y te dé paz.' (Números 6:26)
Pues le haces bienaventurado para siempre; Con Tu presencia le deleitas con alegría. (Salmos 21:6)