La obra extraña del Señor
Fabiana ManzewitschQuiero esta mañana compartir una Palabra que ha quemado en mi corazón este tiempo. Como decía la Pastora Meche, muchos años viví en México y de repente no fue algo planeado, con tiempo como a uno le gusta. De repente el Señor es como que me movió el piso. Y el Señor de México de un tiempo de oportunidades donde parecía que todo estaba funcionando y de repente el Señor dijo te vas a Argentina. ¿Qué?. Yo he orado por Argentina pero manda a otro Señor.
Pero bueno, el Señor nos tiene en Argentina y a veces viajamos con mi esposo a México por menos de 24 horas, tomamos nuestras dos reuniones que tenemos ahí en el servicio del domingo, viajamos tres horas hasta la capital de México y regresamos para tomar el avión a Buenos Aires, y llegamos en la mañana a Buenos Aires y en la tarde continuamos con la escuela bíblica que tenemos allí. Usted dirá ¡es cosa de locos!, sí, tiene razón. Pero mi esposo dice siempre algo: hay que hacer las cosas mientras uno tiene fuerzas. Mientras Dios lo permita.