Nueva Biblia Latinoamericana
Alcanzó, pues, Labán a Jacob, quien había plantado su tienda en la región montañosa, y Labán y sus parientes acamparon en los montes de Galaad. (Génesis 31:25)
Entonces Labán dijo a Jacob: "¿Qué has hecho, engañándome y llevándote a mis hijas como si fueran cautivas de guerra? (Génesis 31:26)
¿Por qué huiste en secreto y me engañaste, y no me avisaste para que yo pudiera despedirte con alegría y cantos, con panderos y liras? (Génesis 31:27)
¿Por qué no me has permitido besar a mis hijos y a mis hijas? En esto has obrado neciamente.
Tengo poder para hacerte daño, pero anoche el Dios de tu padre me dijo: 'De ningún modo hables a Jacob ni bien ni mal.' (Génesis 31:29)
Ahora, ciertamente te has marchado porque anhelabas mucho la casa de tu padre. Pero ¿por qué robaste mis dioses?" (Génesis 31:30)
Entonces Jacob respondió a Labán: "Porque tuve miedo, pues dije: 'No sea que me quites a tus hijas a la fuerza.' (Génesis 31:31)

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Génesis 31:28 - Referencia Cruzada

Comenzaron todos a llorar desconsoladamente, y abrazando a Pablo, lo besaban. (Hechos 20:37)
Labán se levantó muy de mañana, besó a sus hijos y a sus hijas, y los bendijo. Entonces Labán se fue y regresó a su lugar. (Génesis 31:55)
Dejando él los bueyes, corrió tras Elías, y dijo: "Permítame besar a mi padre y a mi madre, entonces lo seguiré." Y él le dijo: "Ve, vuélvete, pues, ¿qué te he hecho yo?" (1 Reyes 19:20)
Porque los ojos del SEÑOR recorren toda la tierra para fortalecer a aquéllos cuyo corazón es completamente Suyo. Tú has obrado neciamente en esto. Ciertamente, desde ahora habrá guerras contra ti." (2 Crónicas 16:9)
Pero el hombre natural no acepta las cosas del Espíritu de Dios, porque para él son necedad; y no las puede entender, porque son cosas que se disciernen (se examinan) espiritualmente. (1 Corintios 2:14)
Y el SEÑOR dijo a Aarón: "Ve al encuentro de Moisés en el desierto." El fue y le salió al encuentro en el monte de Dios, y lo besó. (Éxodo 4:27)
Y ellas alzaron sus voces y lloraron otra vez; y Orfa besó a su suegra, pero Rut se quedó con ella. (Rut 1:14)
Samuel dijo a Saúl: "Has obrado neciamente; no has guardado el mandamiento que el SEÑOR tu Dios te ordenó, pues ahora el SEÑOR hubiera establecido tu reino sobre Israel para siempre. (1 Samuel 13:13)
Cuando Labán oyó las noticias de Jacob, hijo de su hermana, corrió a su encuentro, lo abrazó, lo besó y lo trajo a su casa. Entonces él contó a Labán todas estas cosas. (Génesis 29:13)
Que el SEÑOR les conceda que hallen descanso, cada una en la casa de su marido." Entonces las besó, y ellas alzaron sus voces y lloraron, (Rut 1:9)
Yo soy el Dios de Betel, donde tú ungiste un pilar, donde Me hiciste un voto. Levántate ahora, sal de esta tierra, y vuelve a la tierra donde naciste.'" (Génesis 31:13)
Entonces el SEÑOR dijo a Jacob: "Vuelve a la tierra de tus padres y a tus familiares, y Yo estaré contigo." (Génesis 31:3)
Pero Dios vino a Labán Arameo en sueños durante la noche, y le dijo: "De ningún modo hables a Jacob ni bien ni mal." (Génesis 31:24)