Y sucedió que por el tiempo cuando el rebaño estaba en celo, alcé los ojos y vi en sueños que los machos cabríos que cubrían las hembras eran rayados, moteados y abigarrados.
(Génesis 31:10)Entonces el ángel de Dios me dijo en el sueño: 'Jacob'; y yo respondí: 'Aquí estoy.'
(Génesis 31:11)Y él dijo: 'Levanta ahora los ojos y ve que todos los machos cabríos que están cubriendo las hembras son rayados, moteados y abigarrados, pues yo he visto todo lo que Labán te ha hecho.
(Génesis 31:12)Yo soy el Dios de Betel, donde tú ungiste un pilar, donde Me hiciste un voto. Levántate ahora, sal de esta tierra, y vuelve a la tierra donde naciste.'"
Raquel y Lea le respondieron: "¿Tenemos todavía nosotras parte o herencia alguna en la casa de nuestro padre?
(Génesis 31:14)¿No nos ha tratado como extranjeras? Pues nos ha vendido, y también ha consumido por completo el precio de nuestra compra.
(Génesis 31:15)Ciertamente, toda la riqueza que Dios ha quitado de nuestro padre es nuestra y de nuestros hijos; ahora pues, todo lo que Dios te ha dicho, hazlo."
(Génesis 31:16)Otras publicaciones relacionadas con "Génesis 31:13":
Génesis 31:13 - Referencia Cruzada
Entonces Jacob dijo: "Oh Dios de mi padre Abraham y Dios de mi padre Isaac, oh SEÑOR, que me dijiste: 'Vuelve a tu tierra y a tus familiares, y Yo te haré prosperar.'
(Génesis 32:9)Tuvo un sueño, y vio que había una escalera apoyada en la tierra cuyo extremo superior alcanzaba hasta el cielo. Por ella los ángeles de Dios subían y bajaban.
(Génesis 28:12)Entonces el SEÑOR dijo a Jacob: "Vuelve a la tierra de tus padres y a tus familiares, y Yo estaré contigo."
(Génesis 31:3)Edificó allí un altar, y llamó al lugar El Betel (Dios de Betel), porque allí Dios se le había manifestado cuando huía de su hermano.
(Génesis 35:7)