Nueva Biblia Latinoamericana
una tierra donde comerás el pan sin escasez, donde nada te faltará; una tierra cuyas piedras son hierro, y de cuyos montes puedes sacar cobre. (Deuteronomio 8:9)
Cuando hayas comido y te hayas saciado, bendecirás al SEÑOR tu Dios por la buena tierra que El te ha dado. (Deuteronomio 8:10)
Cuídate de no olvidar al SEÑOR tu Dios dejando de guardar Sus mandamientos, Sus ordenanzas y Sus estatutos que yo te ordeno hoy; (Deuteronomio 8:11)
no sea que cuando hayas comido y te hayas saciado, y hayas construido buenas casas y habitado en ellas,
y cuando tus vacas y tus ovejas se multipliquen, y tu plata y oro se multipliquen, y todo lo que tengas se multiplique, (Deuteronomio 8:13)
entonces tu corazón se enorgullezca, y te olvides del SEÑOR tu Dios que te sacó de la tierra de Egipto de la casa de servidumbre (de esclavos). (Deuteronomio 8:14)
El te condujo a través del inmenso y terrible desierto, con sus serpientes abrasadoras y escorpiones, tierra sedienta donde no había agua; El sacó para ti agua de la roca de pedernal. (Deuteronomio 8:15)

Otras publicaciones relacionadas con "Deuteronomio 8:12":

Dr. Roberto Miranda
Conoce la tierra en que caminas
Conoce la tierra en que caminas - reflexiones sobre la vida cristiana y cómo enfrentar las dificultades


Dr. Roberto Miranda
Buena semilla, pero mala tierra
El Capítulo 13 de Números relata la historia de los hebreos que se preparan para entrar en la Tierra Prometida, pero la primera generación de hebreos no pudo entrar debido a su incredulidad y falta de fe. Solo Caleb y Josué, quienes le creyeron a Dios, alcanzaron la bendición. Este artículo nos exhorta a convertirnos en tierra fértil para recibir las semillas de bendición que Dios quiere plantar en nosotros.


Deuteronomio 8:12 - Referencia Cruzada

Fue lo mismo que ocurrió en los días de Lot: comían, bebían, compraban, vendían, plantaban, construían; (Lucas 17:28)
Yo te cuidé en el desierto, En tierra muy árida. (Oseas 13:5)
El que dice: 'Me edificaré una casa espaciosa Con amplios aposentos altos'; Y le abre ventanas, La recubre de cedro y la pinta de rojo. (Jeremías 22:14)
Pero Jesurún (Israel) engordó y dio coces (has engordado, estás cebado y rollizo); Entonces abandonó a Dios que lo hizo, Y despreció a la Roca de su salvación. (Deuteronomio 32:15)
No sea que me sacie y te niegue, y diga: "¿Quién es el SEÑOR?" O que sea menesteroso y robe, Y profane el nombre de mi Dios. (Proverbios 30:9)
Por tanto, ya que imponen fuertes impuestos sobre el pobre Y exigen de él tributo de grano, Las casas de piedra labrada que han edificado, No las habitarán; Han plantado viñas escogidas, pero no beberán su vino. (Amós 5:11)
Engrandecí mis obras, me edifiqué casas, me planté viñas; (Eclesiastés 2:4)
Porque cuando Yo los introduzca en la tierra que mana leche y miel, la cual juré a sus padres, y ellos coman y se sacien y prosperen, se volverán a otros dioses y los servirán, y Me despreciarán y quebrantarán Mi pacto. (Deuteronomio 31:20)
Por cuanto no serviste al SEÑOR tu Dios con alegría y con gozo de corazón, cuando tenías la abundancia de todas las cosas, (Deuteronomio 28:47)
los cuales dicen: '¿No está cerca el tiempo de edificar casas? Esta ciudad es la olla y nosotros la carne.' (Ezequiel 11:3)
¿Es acaso tiempo para que ustedes habiten en sus casas artesonadas mientras esta casa está desolada?" (Hageo 1:4)