Nueva Biblia Latinoamericana
Entonces Dios vino a Balaam y le preguntó: "¿Quiénes son estos hombres que están contigo?" (Números 22:9)
Y Balaam respondió a Dios: "Balac, hijo de Zipor, rey de Moab, me ha enviado un mensaje: (Números 22:10)
Mira, el pueblo que salió de Egipto cubre la superficie de la tierra; ven ahora, maldícemelos; quizá yo pueda pelear contra ellos y expulsarlos.'" (Números 22:11)
Y Dios dijo a Balaam: "No vayas con ellos; no maldecirás al pueblo, porque es bendito."
Balaam se levantó de mañana y dijo a los jefes de Balac: "Vuelvan a su tierra, porque el SEÑOR ha rehusado dejarme ir con ustedes." (Números 22:13)
Y los jefes de Moab se levantaron y volvieron a Balac, y le dijeron: "Balaam rehusó venir con nosotros." (Números 22:14)
Entonces Balac envió jefes otra vez, más numerosos y más distinguidos que los anteriores. (Números 22:15)

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Números 22:12 - Referencia Cruzada

Pero el SEÑOR tu Dios no quiso escuchar a Balaam, sino que el SEÑOR tu Dios te cambió la maldición en bendición, porque el SEÑOR tu Dios te ama. (Deuteronomio 23:5)
Bienaventurado el pueblo a quien así le sucede; Bienaventurado el pueblo cuyo Dios es el SEÑOR. (Salmos 144:15)
Y estando Pilato sentado en el tribunal, su mujer le mandó aviso, diciendo: "No tengas nada que ver con ese Justo, porque hoy he sufrido mucho en sueños por causa de El." (Mateo 27:19)
Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos ha bendecido con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo. (Efesios 1:3)
Bienaventurado aquél cuya ayuda es el Dios de Jacob, Cuya esperanza está en el SEÑOR su Dios, (Salmos 146:5)
Entonces Balac le dijo: "Te ruego que vengas conmigo a otro sitio desde donde podrás verlos, aunque sólo verás el extremo de ellos, y no los verás a todos; y desde allí maldícemelos." (Números 23:13)
Porque no hay agüero contra Jacob, Ni hay adivinación contra Israel. A su tiempo se le dirá a Jacob Y a Israel: '¡Vean lo que ha hecho Dios!' (Números 23:23)
Pero, les ruego que permanezcan aquí también esta noche, y sabré que más me dice el SEÑOR." (Números 22:19)
En un sueño, en una visión nocturna, Cuando un sueño profundo cae sobre los hombres, Mientras dormitan en sus lechos, (Job 33:15)
Como también David habla de la bendición que viene sobre el hombre a quien Dios atribuye justicia aparte de las obras: (Romanos 4:6)
Dios no es hombre, para que mienta, Ni hijo de hombre, para que se arrepienta. ¿Lo ha dicho El, y no lo hará? ¿Ha hablado, y no lo cumplirá? (Números 23:19)
Luego Balaam dijo a Balac: "Ponte junto a tu holocausto, y yo iré; quizá el SEÑOR venga a mi encuentro, y lo que me manifieste te lo haré saber." Y se fue a un cerro sin vegetación. (Números 23:3)
Haré de ti una nación grande, Y te bendeciré, Engrandeceré tu nombre, Y serás bendición. (Génesis 12:2)
y le dijo: "Por Mí mismo he jurado," declara el SEÑOR, "que por cuanto has hecho esto y no me has rehusado tu hijo, tu único, (Génesis 22:16)
Porque los dones y el llamamiento de Dios son irrevocables. (Romanos 11:29)
Dichoso tú, Israel. ¿Quién como tú, pueblo salvado por el SEÑOR? El es escudo de tu ayuda, Y espada de tu gloria. Tus enemigos simularán someterse ante ti, Y tú pisotearás sus lugares altos." (Deuteronomio 33:29)
Pueblo Mío, acuérdate ahora De lo que tramó Balac, rey de Moab, Y de lo que le respondió Balaam, hijo de Beor, Desde Sitim hasta Gilgal, Para que conozcas las justicias del SEÑOR." (Miqueas 6:5)