Nueva Biblia Latinoamericana
Yo planté, Apolos regó, pero Dios ha dado el crecimiento. (1 Corintios 3:6)
Así que ni el que planta ni el que riega es algo, sino Dios, que da el crecimiento. (1 Corintios 3:7)
Ahora bien, el que planta y el que riega son una misma cosa, pero cada uno recibirá su propia recompensa (su propio salario) conforme a su propio trabajo. (1 Corintios 3:8)
Porque nosotros somos colaboradores en la labor de Dios, y ustedes son el campo de cultivo de Dios, el edificio de Dios.
Conforme a la gracia de Dios que me fue dada, yo, como sabio arquitecto, puse el fundamento, y otro edifica sobre él. Pero cada uno tenga cuidado cómo edifica encima. (1 Corintios 3:10)
Pues nadie puede poner otro fundamento que el que ya está puesto, el cual es Jesucristo. (1 Corintios 3:11)
Ahora bien, si sobre este fundamento alguien edifica con oro, plata, piedras preciosas, madera, heno, paja, (1 Corintios 3:12)

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1 Corintios 3:9 - Referencia Cruzada

Y dile: 'Así dice el SEÑOR de los ejércitos: "Vendrá un hombre cuyo nombre es Renuevo, porque El brotará del lugar donde está y reedificará el templo del SEÑOR. (Zacarías 6:12)
Este Jesús es la PIEDRA DESECHADA por ustedes LOS CONSTRUCTORES, pero QUE HA VENIDO A SER LA PIEDRA ANGULAR. (Hechos 4:11)
Cuando Jesús llegó al templo, los principales sacerdotes y los ancianos del pueblo se acercaron a El mientras enseñaba, diciendo: "¿Con qué autoridad haces estas cosas, y quién Te dio esta autoridad?" (Mateo 21:23)
Yo planté, Apolos regó, pero Dios ha dado el crecimiento. (1 Corintios 3:6)
Entonces Jesús dejó a la multitud y entró en la casa. Y se acercaron Sus discípulos, diciendo: "Explícanos la parábola de la cizaña del campo." (Mateo 13:36)
Porque somos hechura Suya, creados en Cristo Jesús para hacer buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviéramos en ellas. (Efesios 2:10)
Tú visitas la tierra y la riegas en abundancia, En gran manera la enriqueces. El río de Dios rebosa de agua; Tú les preparas su grano, porque así preparas la tierra. (Salmos 65:9)
Tú removiste una vid de Egipto; Expulsaste las naciones y plantaste la vid. (Salmos 80:8)
La piedra que desecharon los edificadores Ha venido a ser la piedra principal del ángulo. (Salmos 118:22)
Yo soy la vid verdadera, y Mi Padre es el viñador. (Juan 15:1)
¡Cuán bienaventurados serán ustedes los que siembran junto a todas las aguas, Y dejan sueltos al buey y al asno! (Isaías 32:20)
Porque Jesús ha sido considerado digno de más gloria que Moisés, así como el constructor de la casa tiene más honra que la casa. (Hebreos 3:3)
Por tanto, nosotros debemos acoger a tales hombres, para que seamos colaboradores en pro de la verdad. (3 Juan 1:8)
¿O qué acuerdo tiene el templo de Dios con los ídolos? Porque nosotros somos el templo del Dios vivo, como Dios dijo: "HABITARE EN ELLOS, Y ANDARE ENTRE ELLOS; Y SERE SU DIOS, Y ELLOS SERAN MI PUEBLO. (2 Corintios 6:16)
Pero Cristo (el Mesías) fue fiel como Hijo sobre la casa de Dios, cuya casa somos nosotros, si retenemos firme hasta el fin nuestra confianza y la gloria de nuestra esperanza. (Hebreos 3:6)
Están edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo Cristo Jesús mismo la piedra angular, (Efesios 2:20)
Aquel día se dirá: "Una viña de vino; de ella canten. (Isaías 27:2)
¿No dicen ustedes: 'Todavía faltan cuatro meses, y después viene la siega'? Pero Yo les digo: alcen sus ojos y vean los campos que ya están blancos para la siega. (Juan 4:35)
firmemente arraigados y edificados en El y confirmados en su fe, tal como fueron instruidos, rebosando de gratitud (con acción de gracias). (Colosenses 2:7)
Pero Yo te planté como vid escogida, Toda ella de semilla genuina. ¿Cómo, pues, te has convertido delante de Mí En un sarmiento degenerado de una vid extraña? (Jeremías 2:21)
En aquel día levantaré el tabernáculo caído de David, Repararé sus brechas, Levantaré sus ruinas, Y lo reedificaré como en el tiempo pasado, (Amós 9:11)
Ustedes, pues, escuchen la parábola del sembrador. (Mateo 13:18)
¿Acaso para sembrar se pasa arando el labrador todo el día, Abriendo y rastrillando su tierra? (Isaías 28:24)
¿O no saben que su cuerpo es templo del Espíritu Santo que está en ustedes, el cual tienen de Dios, y que ustedes no se pertenecen a sí mismos? (1 Corintios 6:19)
pero en caso que me tarde, te escribo para que sepas cómo debe conducirse uno en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios vivo, columna y sostén de la verdad. (1 Timoteo 3:15)
Entonces dijo a Sus discípulos: "La cosecha es mucha, pero los obreros pocos. (Mateo 9:37)
Yo también te digo que tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré Mi iglesia; y las Puertas del Hades (los poderes de la muerte) no prevalecerán contra ella. (Mateo 16:18)
Porque el reino de los cielos es semejante a un hacendado que salió muy de mañana para contratar obreros para su viña. (Mateo 20:1)
Porque como la tierra produce sus renuevos, Y como el huerto hace brotar lo sembrado en él, Así el Señor DIOS hará que la justicia y la alabanza Broten en presencia de todas las naciones. (Isaías 61:11)
Y les habló muchas cosas en parábolas, diciendo: "El sembrador salió a sembrar; (Mateo 13:3)
Jesús decía también: "El reino de Dios es como un hombre que echa semilla en la tierra, (Marcus 4:26)
Cantaré ahora a mi amado, El canto de mi amado acerca de Su viña. Mi bien amado tenía una viña en una fértil colina. (Isaías 5:1)
Se presentarán extraños y apacentarán los rebaños de ustedes, E hijos de extranjeros serán sus labradores y sus viñadores. (Isaías 61:5)
Haya abundancia de grano en la tierra, en las cumbres de los montes; Su fruto se mecerá como los cedros del Líbano; Que los de la ciudad florezcan como la hierba de la tierra. (Salmos 72:16)
Y ellos salieron y predicaron por todas partes, colaborando el Señor con ellos, y confirmando la palabra por medio de las señales que la seguían. Ellas comunicaron inmediatamente a Pedro y a sus compañeros todas estas instrucciones. Y después de esto, Jesús mismo envió por medio de ellos, desde el oriente hasta el occidente, el mensaje sacrosanto e incorruptible de la salvación eterna. (Marcus 16:20)
Y como colaboradores con El , también les exhortamos a no recibir en vano la gracia de Dios; (2 Corintios 6:1)
también ustedes, como piedras vivas, sean edificados como casa espiritual para un sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo. (1 Pedro 2:5)
Para conceder que a los que lloran en Sion Se les dé diadema en vez de ceniza, Aceite de alegría en vez de luto, Manto de alabanza en vez de espíritu abatido; Para que sean llamados robles de justicia, Plantío del SEÑOR, para que El sea glorificado. (Isaías 61:3)
¿No saben que ustedes son templo de Dios y que el Espíritu de Dios habita en ustedes? (1 Corintios 3:16)