Al caer a tierra, oyó una voz que le decía: "Saulo, Saulo, ¿por qué Me persigues?"
(Hechos 9:4)¿Quién eres, Señor?" preguntó Saulo. El Señor respondió: "Yo soy Jesús a quien tú persigues;
(Hechos 9:5)levántate, entra en la ciudad, y se te dirá lo que debes hacer."
(Hechos 9:6)Los hombres que iban con él se detuvieron atónitos (mudos), oyendo la voz, pero sin ver a nadie.
Saulo se levantó del suelo, y aunque sus ojos estaban abiertos, no veía nada; y llevándolo por la mano, lo trajeron a Damasco.
(Hechos 9:8)Estuvo tres días sin ver, y no comió ni bebió.
(Hechos 9:9)Había en Damasco cierto discípulo llamado Ananías; y el Señor le dijo en una visión: "Ananías." "Aquí estoy, Señor," contestó él.
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Hechos 9:7 - Referencia Cruzada
Por eso la multitud que estaba allí y oyó la voz, decía que había sido un trueno; otros decían: "Un ángel Le ha hablado."
(Juan 12:29)al mediodía, oh rey, yendo de camino, vi una luz procedente del cielo más brillante que el sol, que resplandecía alrededor mío y de los que viajaban conmigo.
(Hechos 26:13)Y sólo yo, Daniel, vi la visión. Los hombres que estaban conmigo no vieron la visión, pero un gran terror cayó sobre ellos y huyeron a esconderse.
(Daniel 10:7)Entonces estarán dos en el campo; uno será llevado y el otro será dejado.
(Mateo 24:40)Los que estaban conmigo vieron la luz, ciertamente, pero no comprendieron la voz de Aquél que me hablaba.
(Hechos 22:9)