Y aquel siervo que sabía la voluntad de su señor, y que no se preparó ni obró conforme a su voluntad, recibirá muchos azotes;
(Lucas 12:47)
pero el que no la sabía, e hizo cosas que merecían castigo, será azotado poco. A todo el que se le haya dado mucho, mucho se demandará de él; y al que mucho le han confiado, más le exigirán.
(Lucas 12:48)
Yo he venido para echar fuego sobre la tierra, y ¡cómo quisiera que ya estuviera encendido!
(Lucas 12:49)
Pero de un bautismo tengo que ser bautizado, y ¡cómo me angustio hasta que se cumpla!
¿Piensan que vine a dar paz en la tierra? No, les digo, sino más bien división.
(Lucas 12:51)
Porque desde ahora en adelante, cinco en una casa estarán divididos; tres contra dos y dos contra tres.
(Lucas 12:52)
Estarán divididos el padre contra el hijo y el hijo contra el padre; la madre contra la hija y la hija contra la madre; la suegra contra su nuera y la nuera contra su suegra."
(Lucas 12:53)
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Lucas 12:50 - Referencia Cruzada
Me deleito en hacer Tu voluntad, Dios mío; Tu ley está dentro de mi corazón."
(Salmos 40:8)
Entonces Jesús les dijo: "Mi tiempo aún no ha llegado, pero el tiempo de ustedes es siempre oportuno.
(Juan 7:6)
Jesús les dijo: "Mi comida es hacer la voluntad del que Me envió y llevar a cabo Su obra.
(Juan 4:34)
Ahora Mi alma se ha angustiado; y ¿qué diré: 'Padre, sálvame de esta hora'? Pero para esto he llegado a esta hora.
(Juan 12:27)
Cuando Jesús iba subiendo a Jerusalén, tomó aparte a los doce discípulos, y por el camino les dijo:
(Mateo 20:17)
Entonces Jesús, cuando hubo tomado el vinagre, dijo: "¡Consumado es! (¡Cumplido está!)" E inclinando la cabeza, entregó el espíritu.
(Juan 19:30)
Por eso procuraban otra vez prender a Jesús, pero El se les escapó de entre las manos.
(Juan 10:39)
Jesús le dijo a Pedro: "Mete la espada en la vaina. La copa que el Padre Me ha dado, ¿acaso no he de beberla?"
(Juan 18:11)
Ahora yo, atado en espíritu, voy a Jerusalén sin saber lo que allá me sucederá,
(Hechos 20:22)
Pero cuando Sus hermanos subieron a la fiesta, entonces Jesús también subió; no abiertamente, sino en secreto.
(Juan 7:10)
Iban por el camino subiendo a Jerusalén, y Jesús iba delante de ellos. Los discípulos estaban perplejos, y los que Lo seguían tenían miedo. Y tomando aparte de nuevo a los doce, comenzó a decirles lo que Le iba a suceder:
(Marcus 10:32)