Nueva Biblia Latinoamericana
Y envió mensajeros delante de El; y ellos fueron y entraron en una aldea de los Samaritanos para hacer los preparativos para El. (Lucas 9:52)
Pero no Lo recibieron, porque sabían que había determinado ir a Jerusalén. (Lucas 9:53)
Al ver esto, Sus discípulos Jacobo (Santiago) y Juan, dijeron: "Señor, ¿quieres que mandemos que descienda fuego del cielo y los consuma?" (Lucas 9:54)
Pero El, volviéndose, los reprendió, y dijo: "Ustedes no saben de qué espíritu son,
porque el Hijo del Hombre no ha venido para destruir las almas de los hombres, sino para salvarlas." Y se fueron a otra aldea. (Lucas 9:56)
Mientras ellos iban por el camino, uno Le dijo: "Te seguiré adondequiera que vayas." (Lucas 9:57)
Las zorras tienen madrigueras (cuevas) y las aves del cielo nidos," le dijo Jesús, "pero el Hijo del Hombre no tiene dónde recostar la cabeza." (Lucas 9:58)

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Lucas 9:55 - Referencia Cruzada

¿Acaso me he alegrado en la destrucción de mi enemigo, O me he regocijado cuando el mal le sobrevino? (Job 31:29)
Entonces David dijo: "¿Qué tengo yo que ver con ustedes, hijos de Sarvia, para que en este día me sean adversarios? ¿Ha de morir hoy hombre alguno en Israel? ¿Acaso no sé que hoy soy rey sobre Israel?" (2 Samuel 19:22)
Velen y oren para que no entren en tentación; el espíritu está dispuesto, pero la carne es débil." (Mateo 26:41)
Yo ciertamente había creído que debía hacer muchos males en contra del nombre de Jesús de Nazaret. (Hechos 26:9)
no devolviendo mal por mal, o insulto por insulto, sino más bien bendiciendo, porque fueron llamados con el propósito de heredar bendición. (1 Pedro 3:9)
De la misma boca proceden bendición y maldición. Hermanos míos, esto no debe ser así. (Santiago 3:10)
de pecado, porque no creen en Mí; (Juan 16:9)
¿A quién has proferido tus palabras, Y de quién es el espíritu que habló en ti? (Job 26:4)
y Moisés y Aarón reunieron al pueblo ante la peña. Y él les dijo: "Oigan, ahora, rebeldes. ¿Sacaremos agua de esta peña para ustedes?" (Números 20:10)
Y uno de los que estaban con Jesús, extendiendo la mano, sacó su espada, e hiriendo al siervo del sumo sacerdote, le cortó la oreja. (Mateo 26:51)
Yo reprendo y disciplino a todos los que amo. Sé, pues, celoso y arrepiéntete. (Apocalipsis 3:19)
Y los hombres de David le dijeron: "Mira, este es el día del que el SEÑOR te habló: 'Voy a entregar a tu enemigo en tu mano, y harás con él como bien te parezca.'" Entonces David se levantó y cortó a escondidas la orilla del manto de Saúl. (1 Samuel 24:4)
Entonces Pablo le dijo: "¡Dios lo golpeará a usted, pared blanqueada! ¿Se sienta usted para juzgarme conforme a la Ley, y viola la Ley ordenando que me golpeen?" (Hechos 23:3)
Pero él le dijo: "Hablas como habla cualquier mujer necia. ¿Aceptaremos el bien de Dios pero no aceptaremos el mal?" En todo esto Job no pecó con sus labios. (Job 2:10)
Escojamos para nosotros lo que es justo; Conozcamos entre nosotros lo que es bueno. (Job 34:4)
¿Piensas que esto es justo? Dices: 'Mi justicia es más que la de Dios.' (Job 35:2)
Pedro Le respondió: "Aunque todos se aparten por causa de Ti, yo nunca me apartaré." (Mateo 26:33)
Más engañoso que todo, es el corazón, Y sin remedio; ¿Quién lo comprenderá? (Jeremías 17:9)
Pero volviéndose El, dijo a Pedro: "¡Quítate de delante de Mí, Satanás! Me eres piedra de tropiezo; porque no estás pensando en las cosas de Dios, sino en las de los hombres." (Mateo 16:23)
Entonces Abisai dijo a David: "Hoy Dios ha entregado a tu enemigo en tu mano. Ahora pues, déjame clavarlo a la tierra de un solo golpe; no tendré que darle por segunda vez." (1 Samuel 26:8)
Por eso me retracto, Y me arrepiento en polvo y ceniza." (Job 42:6)
No reprendas al insolente, para que no te aborrezca; Reprende al sabio, y te amará. (Proverbios 9:8)