Nueva Biblia Latinoamericana
Pero El se quedó callado y nada respondía. Le volvió a preguntar el sumo sacerdote: "¿Eres Tú el Cristo (el Mesías), el Hijo del Bendito?" (Marcus 14:61)
Jesús le contestó: "Yo soy; y verán al HIJO DEL HOMBRE SENTADO A LA DIESTRA DEL PODER y VINIENDO CON LAS NUBES DEL CIELO." (Marcus 14:62)
Entonces el sumo sacerdote, rasgando sus ropas, dijo: "¿Qué necesidad tenemos de más testigos? (Marcus 14:63)
Han oído la blasfemia; ¿qué les parece?" Y todos Lo condenaron, diciendo que era digno de muerte.
Y algunos comenzaron a escupir a Jesús, Le cubrían el rostro y Le daban puñetazos, y Le decían: "¡Profetiza!" También los guardias Lo recibieron a bofetadas. (Marcus 14:65)
Estando Pedro abajo en el patio, llegó una de las sirvientas del sumo sacerdote, (Marcus 14:66)
y al ver a Pedro calentándose, lo miró y dijo: "Tú también estabas con Jesús el Nazareno." (Marcus 14:67)

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Marcus 14:64 - Referencia Cruzada

Jesús les dijo: "En verdad les digo, que antes que Abraham naciera, Yo soy." (Juan 8:58)
Entonces el sumo sacerdote rasgó sus vestiduras, diciendo: "¡Ha blasfemado! ¿Qué necesidad tenemos de más testigos? Ahora mismo ustedes han oído la blasfemia. (Mateo 26:65)
Los Judíos volvieron a tomar piedras para tirárselas. (Juan 10:31)
Y ellos dijeron: "¿Qué necesidad tenemos ya de testimonio? Pues nosotros mismos lo hemos oído de Su propia boca." (Lucas 22:71)
Y escribió en las cartas: "Proclamen ayuno y sienten a Nabot a la cabeza del pueblo. (1 Reyes 21:9)
Los Judíos le respondieron: "Nosotros tenemos una ley, y según esa ley El debe morir, porque pretendió ser el Hijo de Dios." (Juan 19:7)
Entonces, por esta causa, los Judíos aún más procuraban matar a Jesús, porque no sólo violaba el día de reposo, sino que también llamaba a Dios Su propio Padre, haciéndose igual a Dios. (Juan 5:18)
Además, el que blasfeme el nombre del SEÑOR, ciertamente ha de morir; toda la congregación ciertamente lo apedreará. Tanto el extranjero como el nativo, cuando blasfeme el Nombre, ha de morir. (Levítico 24:16)