Nueva Biblia Latinoamericana
pero no tienen raíz profunda en sí mismos, sino que sólo son temporales. Entonces, cuando viene la aflicción o la persecución por causa de la palabra, enseguida se apartan de ella. (Marcus 4:17)
Otros son aquéllos en los que se sembró la semilla entre los espinos; éstos son los que han oído la palabra, (Marcus 4:18)
pero las preocupaciones del mundo, y el engaño de las riquezas, y los deseos de las demás cosas entran y ahogan la palabra, y se vuelve estéril. (Marcus 4:19)
Y otros son aquéllos en que se sembró la semilla en tierra buena; los cuales oyen la palabra, la aceptan y dan fruto, unos a treinta, otros a sesenta y otros a ciento por uno."
También Jesús les decía: "¿Acaso se trae una lámpara para ponerla debajo de una vasija o debajo de la cama? ¿No es para ponerla en el candelero? (Marcus 4:21)
Porque nada hay oculto, si no es para que sea manifestado; ni nada ha estado en secreto, sino para que salga a la luz. (Marcus 4:22)
Si alguno tiene oídos para oír, que oiga." (Marcus 4:23)

Otras publicaciones relacionadas con "Marcus 4:20":

Dr. Roberto Miranda
Una Cita con Cristo : La Parabola del Sembrador (Mateo 13:1) Parte 6
Una reflexión sobre la parábola del sembrador y la importancia de no dejarse distraer por las cosas materiales del mundo.


Dr. Roberto Miranda
Una Cita con Cristo : La Parabola del Sembrador (Mateo 13:1) Parte 5
Continuación del análisis de la Parábola del Sembrador en el Evangelio de Mateo y su aplicación a las personas que se enfocan en lo material en lugar de lo espiritual.


Dr. Roberto Miranda
Una Cita con Cristo : La Parabola del Sembrador (Mateo 13:1) Parte 7
Una reflexión sobre la importancia de recibir la palabra de Dios con reverencia y amor, basada en la Parábola del Sembrador de Mateo 13:1


Dr. Roberto Miranda
Una radiografía del corazón humano
En este artículo, el pastor Roberto Miranda habla sobre la parábola del sembrador y cómo se aplica a nuestras vidas. También reflexiona sobre la proclamación del Evangelio y la importancia de entender que hay factores externos que influyen en la recepción del mensaje. Además, invita a los lectores a examinar su propia vida y determinar qué tipo de tierra son.


Dr. Roberto Miranda
Una Cita con Cristo : La Parabola del Sembrador (Mateo 13:1) Parte 3
En este mensaje, el Dr. Roberto Miranda habla del segundo tipo de tierra de la parábola del sembrador en el Evangelio según San Mateo e insta a los creyentes a mantenerse firmes y perseverar en su compromiso con Cristo a pesar de las pruebas y dificultades.


Dr. Roberto Miranda
¿Qué tipo de tierra eres?
En este sermón, el pastor habla sobre la parábola del sembrador y la importancia de predicar fielmente la palabra de Dios, dejando el resultado en manos de Dios. También habla de la importancia de la oración y la guerra espiritual en la evangelización, y cómo los nuevos creyentes pueden enfrentar pruebas. El pastor anima a los creyentes a mantenerse firmes en la fe y dar fruto en diferentes capacidades.


Dr. Roberto Miranda
Buena semilla o cizaña? No te apures a juzgar!
Reflexión sobre la importancia de no juzgar y de la necesidad de disciplina con amor y misericordia en la Iglesia, a partir de la parábola del trigo y la cizaña contada por Jesús en Mateo 13.


Dr. Roberto Miranda
Una Cita con Cristo : La Parabola del Sembrador (Mateo 13:1) Parte 4
Reflexión sobre cómo el Evangelio puede traer pruebas y dificultades a la vida de un creyente, pero si se mantienen firmes y perseveran, el Señor los ayudará a superar las pruebas y crecer en su relación con Él.


Dr. Roberto Miranda
Una Cita con Cristo : La Parabola del Sembrador (Mateo 13:1) Parte 2
En este artículo, el Dr. Roberto Miranda analiza la Parábola del Sembrador (Mateo 13:1) Parte 2 y su importancia en la recepción del Evangelio y la vida eterna en paz con Dios.


Dr. Roberto Miranda
Dios quiere tu perfección
La meta del Espíritu Santo es llevarnos a la perfección y asemejarnos a Cristo. Dios nos trata y disciplina para hacernos más aptos para el servicio cristiano y prepararnos para ser buenos testigos. Debemos estar inquietos por cómo Dios nos está usando y cómo estamos contribuyendo al Reino de Dios. Cada cristiano tiene un llamado y un don, y debemos usarlos para el Reino de Dios. Dios espera que paguemos el precio de ser cristianos y que pasemos por el proceso de la crucifixión, la transformación y el trato de Dios. Si no damos fruto, Dios nos quitará. Debemos tener hambre y sed de Dios en nuestras vidas y ser un miembro fidedigno y honroso del Cuerpo de Jesucristo.


Dr. Roberto Miranda
No rehúya de las pruebas
Este artículo del Dr. Roberto Miranda habla sobre cómo las pruebas y dificultades son necesarias para la formación del carácter de Cristo en los hijos de Dios. Se utiliza la parábola de la higuera para explicar cómo Dios espera que demos frutos y cómo el Espíritu Santo nos ayuda a darlos. También se habla de la importancia de usar los dones que Dios nos ha dado y de discernir cuándo resistir y cuándo dejar que Dios forme.


Marcus 4:20 - Referencia Cruzada

Por tanto, hermanos míos, también a ustedes se les hizo morir a la Ley por medio del cuerpo de Cristo, para que sean unidos a otro, a Aquél que resucitó de entre los muertos, a fin de que llevemos fruto para Dios. (Romanos 7:4)
Pues estas virtudes, al estar en ustedes y al abundar, no los dejarán ociosos (ser inútiles) ni estériles en el verdadero conocimiento de nuestro Señor Jesucristo. (2 Pedro 1:8)
Y otras semillas cayeron en buena tierra, y creciendo y desarrollándose, dieron fruto, y produjeron unas a treinta, otras a sesenta y otras a ciento por uno." (Marcus 4:8)
Pero el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fidelidad, (Gálatas 5:22)
Por lo demás, hermanos, les rogamos, y les exhortamos en el Señor Jesús, que tal como han recibido de nosotros instrucciones acerca de la manera en que deben andar (se deben conducir) y agradar a Dios, como de hecho ya andan, así abunden en ello más y más. (1 Tesalonicenses 4:1)
Pero aquél en quien se sembró la semilla en tierra buena, éste es el que oye la palabra y la entiende; éste sí da fruto y produce, uno a ciento, otro a sesenta y otro a treinta por uno." (Mateo 13:23)
para que anden como es digno del Señor, haciendo en todo, lo que Le agrada, dando fruto en toda buena obra y creciendo en el conocimiento de Dios. (Colosenses 1:10)
Ustedes no me escogieron a Mí, sino que Yo los escogí a ustedes, y los designé para que vayan y den fruto, y que su fruto permanezca; para que todo lo que pidan al Padre en Mi nombre se lo conceda. (Juan 15:16)
llenos del fruto de justicia que es por medio de Jesucristo, para la gloria y alabanza de Dios. (Filipenses 1:11)
Pero la semilla en la tierra buena, son los que han oído la palabra con corazón recto y bueno, y la retienen, y dan fruto con su perseverancia. (Lucas 8:15)
Permanezcan en Mí, y Yo en ustedes. Como el sarmiento no puede dar fruto por sí mismo si no permanece en la vid, así tampoco ustedes si no permanecen en Mí. (Juan 15:4)
Isaac sembró en aquella tierra, y cosechó aquel año ciento por uno. Y el SEÑOR lo bendijo. (Génesis 26:12)