Nueva Biblia Latinoamericana
Pero tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cuando hayas cerrado la puerta, ora a tu Padre que está en secreto, y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará. (Mateo 6:6)
Y al orar, no usen ustedes repeticiones sin sentido, como los Gentiles, porque ellos se imaginan que serán oídos por su palabrería. (Mateo 6:7)
Por tanto, no se hagan semejantes a ellos; porque su Padre sabe lo que ustedes necesitan antes que ustedes lo pidan. (Mateo 6:8)
Ustedes, pues, oren de esta manera: 'Padre nuestro que estás en los cielos, Santificado sea Tu nombre.
Venga Tu reino. Hágase Tu voluntad, Así en la tierra como en el cielo. (Mateo 6:10)
Danos hoy el pan nuestro de cada día. (Mateo 6:11)
Y perdónanos nuestras deudas (ofensas, pecados), como también nosotros hemos perdonado a nuestros deudores (los que nos ofenden, nos hacen mal). (Mateo 6:12)

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Mateo 6:9 - Referencia Cruzada

Pablo, apóstol, no de parte de hombres ni mediante hombre alguno, sino por medio de Jesucristo y de Dios el Padre que Lo resucitó de entre los muertos, (Gálatas 1:1)
Y porque ustedes son hijos, Dios ha enviado el Espíritu de Su Hijo a nuestros corazones, clamando: "¡Abba! ¡Padre!" (Gálatas 4:6)
Y el uno al otro daba voces, diciendo: "Santo, Santo, Santo, es el SEÑOR de los ejércitos, Llena está toda la tierra de Su gloria." (Isaías 6:3)
Pues si ustedes, siendo malos, saben dar buenas dádivas a sus hijos, ¿cuánto más su Padre que está en los cielos dará cosas buenas a los que Le piden? (Mateo 7:11)
Vindicaré la santidad de Mi gran nombre profanado entre las naciones, el cual ustedes han profanado en medio de ellas. Entonces las naciones sabrán que Yo soy el SEÑOR," declara el Señor DIOS "cuando demuestre Mi santidad entre ustedes a la vista de ellas. (Ezequiel 36:23)
Y no llamen a nadie padre suyo en la tierra, porque Uno es su Padre, el que está en los cielos. (Mateo 23:9)
el único que tiene inmortalidad y habita en luz inaccesible, a quien ningún hombre ha visto ni puede ver. A El sea la honra y el dominio eterno. Amén. (1 Timoteo 6:16)
Nuestro Dios está en los cielos; El hace lo que Le place. (Salmos 115:3)
Porque así dice el Alto y Sublime Que vive para siempre, cuyo nombre es Santo: "Yo habito en lo alto y santo, Y también con el contrito y humilde de espíritu, Para vivificar el espíritu de los humildes Y para vivificar el corazón de los contritos. (Isaías 57:15)
Pero tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cuando hayas cerrado la puerta, ora a tu Padre que está en secreto, y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará. (Mateo 6:6)
escucha Tú desde los cielos, el lugar de Tu morada, y haz conforme a todo lo que el extranjero Te pida. Para que todos los pueblos de la tierra conozcan Tu nombre para que Te teman, como Te teme Tu pueblo Israel, y para que sepan que Tu nombre es invocado sobre esta casa que he edificado. (1 Reyes 8:43)
Y ahora, SEÑOR, Dios nuestro, líbranos de su mano para que todos los reinos de la tierra sepan que sólo Tú, oh SEÑOR, eres Dios." (Isaías 37:20)
Así brille la luz de ustedes delante de los hombres, para que vean sus buenas acciones y glorifiquen a su Padre que está en los cielos. (Mateo 5:16)
Pues ustedes no han recibido un espíritu de esclavitud para volver otra vez al temor, sino que han recibido un espíritu de adopción como hijos, por el cual clamamos: "¡Abba, Padre!" (Romanos 8:15)
Digno eres, Señor y Dios nuestro, de recibir la gloria y el honor y el poder, porque Tú creaste todas las cosas, y por Tu voluntad existen y fueron creadas." (Apocalipsis 4:11)
¿No se venden dos pajarillos por una monedita? Y sin embargo, ni uno de ellos caerá a tierra sin permitirlo el Padre. (Mateo 10:29)
Aconteció que estando Jesús orando en cierto lugar, cuando terminó, Le dijo uno de Sus discípulos: "Señor, enséñanos a orar, así como Juan enseñó también a sus discípulos." (Lucas 11:1)
Porque Tú eres nuestro Padre, aunque Abraham no nos conoce, Ni nos reconoce Israel. Tú, oh SEÑOR, eres nuestro Padre, Desde la antigüedad Tu nombre es Nuestro Redentor. (Isaías 63:16)
A todos los amados de Dios que están en Roma, llamados a ser santos: Gracia y paz a ustedes de parte de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo. (Romanos 1:7)
El ha enviado redención a Su pueblo, Ha ordenado Su pacto para siempre; Santo y temible es Su nombre. (Salmos 111:9)
Entonces los Levitas, Jesúa, Cadmiel, Bani, Hasabnías, Serebías, Hodías, Sebanías y Petaías, dijeron: "Levántense, bendigan al SEÑOR su Dios por siempre y para siempre. Sea bendito Tu glorioso nombre Y exaltado sobre toda bendición y alabanza. (Nehemías 9:5)
El SEÑOR será Rey sobre toda la tierra. En aquel día el SEÑOR será uno, y uno Su nombre. (Zacarías 14:9)
Gloria a Dios en las alturas, Y en la tierra paz entre los hombres (de buena voluntad) en quienes El se complace." (Lucas 2:14)
Y sea confirmado y engrandecido Tu nombre para siempre, al decirse: 'El SEÑOR de los ejércitos, el Dios de Israel, es Dios para Israel; y que la casa de Tu siervo David sea establecida delante de Ti.' (1 Crónicas 17:24)
Porque desde la salida del sol hasta su puesta, Mi nombre será grande entre las naciones, y en todo lugar se ofrecerá incienso a Mi nombre, y ofrenda pura de cereal; porque grande será Mi nombre entre las naciones," dice el SEÑOR de los ejércitos. (Malaquías 1:11)
Así dice el SEÑOR: "El cielo es Mi trono y la tierra el estrado de Mis pies. ¿Dónde, pues, está la casa que podrían edificarme? ¿Dónde está el lugar de Mi reposo? (Isaías 66:1)
Porque si ustedes perdonan a los hombres sus transgresiones (faltas, delitos), también su Padre celestial les perdonará a ustedes. (Mateo 6:14)
Y si invocan como Padre a Aquél que imparcialmente juzga según la obra de cada uno, condúzcanse con temor (reverencia) durante el tiempo de su peregrinación. (1 Pedro 1:17)
Pues la tierra se llenará Del conocimiento de la gloria del SEÑOR Como las aguas cubren el mar. (Habacuc 2:14)
Pero ahora, oh SEÑOR, Tú eres nuestro Padre, Nosotros el barro, y Tú nuestro alfarero; Obra de Tus manos somos todos nosotros. (Isaías 64:8)
que decían a gran voz: "El Cordero que fue inmolado es digno de recibir el poder, las riquezas, la sabiduría, la fortaleza, el honor, la gloria y la alabanza." (Apocalipsis 5:12)
Apartándose de nuevo, oró por segunda vez, diciendo: "Padre Mío, si esta copa no puede pasar sin que Yo la beba, hágase Tu voluntad." (Mateo 26:42)
Y el hijo le dijo: 'Padre, he pecado contra el cielo y ante ti; ya no soy digno de ser llamado hijo tuyo.' (Lucas 15:21)
Entonces Moisés dijo a Aarón: "Esto es lo que el SEÑOR dijo: 'Como santo seré tratado por los que se acercan a Mí, Y en presencia de todo el pueblo seré honrado.'" Y Aarón guardó silencio. (Levítico 10:3)
Les digo que desde ahora no beberé más de este fruto de la vid, hasta aquel día cuando lo beba nuevo con ustedes en el reino de Mi Padre." (Mateo 26:29)
Y sea engrandecido Tu nombre para siempre, al decirse: 'El SEÑOR de los ejércitos es Dios sobre Israel;' y que la casa de Tu siervo David sea establecida delante de Ti. (2 Samuel 7:26)
Jesús le dijo: "Suéltame (No Me agarres) porque todavía no he subido al Padre; pero ve a Mis hermanos, y diles: 'Subo a Mi Padre y Padre de ustedes, a Mi Dios y Dios de ustedes.'" (Juan 20:17)
Y mostraré Mi grandeza y santidad, y Me daré a conocer a los ojos de muchas naciones; y sabrán que Yo soy el SEÑOR."' (Ezequiel 38:23)
y dijo: "Oh SEÑOR, Dios de nuestros padres, ¿no eres Tú Dios en los cielos? ¿Y no gobiernas Tú sobre todos los reinos de las naciones? En Tu mano hay poder y fortaleza y no hay quien pueda resistirte. (2 Crónicas 20:6)
Bendito sea el SEÑOR Dios, el Dios de Israel, El único que hace maravillas. (Salmos 72:18)
Me levantaré e iré a mi padre, y le diré: "Padre, he pecado contra el cielo y ante ti; (Lucas 15:18)