Nueva Biblia Latinoamericana
Y entonces descubriré su vergüenza Ante los ojos de sus amantes, Y nadie la librará de Mi mano. (Oseas 2:10)
Haré cesar también todo su regocijo, Sus fiestas, sus lunas nuevas, sus días de reposo, Y todas sus solemnidades. (Oseas 2:11)
Devastaré sus vides y sus higueras, De las cuales decía ella: 'Son la paga Que mis amantes me han dado.' Y las convertiré en matorral, Y las devorarán las bestias del campo. (Oseas 2:12)
La castigaré por los días de los Baales Cuando ella les ofrecía sacrificios Y se adornaba con sus zarcillos y joyas, Y se iba tras sus amantes, y se olvidaba de Mí," declara el SEÑOR.
Por tanto, voy a seducirla, Llevarla al desierto, Y hablarle al corazón. (Oseas 2:14)
Allí le daré sus viñas, Y el Valle de Acor por puerta de esperanza. Y allí cantará como en los días de su juventud, Como en el día en que subió de la tierra de Egipto. (Oseas 2:15)
Sucederá en aquel día," declara el SEÑOR, "que Me llamarás Ishí (esposo mío) Y no Me llamarás más Baalí (mi señor). (Oseas 2:16)

Otras publicaciones relacionadas con "Oseas 2:13":

Dr. Roberto Miranda
Nuestra fe debe afectar todos los aspectos de nuestra vida
Consejos sobre cómo la fe debe afectar todos los aspectos de nuestra vida, desde nuestras creencias hasta nuestras decisiones públicas y políticas. Al renunciar al pecado y vivir según los principios espirituales, podemos recibir la bendición de Dios.


Fabiana Manzewitsch
La obra extraña del Señor
En este artículo se habla sobre la obra extraña de Dios y cómo Él puede llevarnos a situaciones incómodas para obrar en nosotros. Se destacan dos pasajes bíblicos donde se enfatiza la importancia de la adoración y la sensibilidad a los vientos del Espíritu. El predicador anima a la congregación a buscar la presencia de Dios y estar atentos a Sus nuevas estrategias.


Oseas 2:13 - Referencia Cruzada

Pero ahora ve, conduce al pueblo adonde te he dicho. Mi ángel irá delante de ti. Pero el día que Yo los visite, los castigaré por su pecado." (Éxodo 32:34)
En Samaria, Ocozías se cayó por la ventana de su aposento alto, y se enfermó. Entonces envió mensajeros diciéndoles: "Vayan, consulten a Baal Zebub, dios de Ecrón, si he de sanar de esta enfermedad." (2 Reyes 1:2)
Por tanto, así dice el Señor DIOS: 'Porque Me has olvidado y Me has arrojado a tus espaldas, carga ahora con el castigo de tu lujuria y de tus prostituciones.'" (Ezequiel 23:35)
Los Israelitas hicieron lo malo ante los ojos del SEÑOR, y olvidaron al SEÑOR su Dios, y sirvieron a los Baales y a las imágenes de Asera (deidad femenina). (Jueces 3:7)
¿Robarán, matarán, cometerán adulterio, jurarán falsamente, ofrecerán sacrificios a Baal y andarán en pos de otros dioses que no habían conocido? (Jeremías 7:9)
Pero los Israelitas volvieron a hacer lo malo ante los ojos del SEÑOR. Sirvieron a los Baales, a Astarot, a los dioses de Aram, a los dioses de Sidón, a los dioses de Moab, a los dioses de los Amonitas y a los dioses de los Filisteos. Abandonaron, pues, al SEÑOR y no le sirvieron. (Jueces 10:6)
Como si fuera poco el andar en los pecados de Jeroboam, hijo de Nabat, tomó por mujer a Jezabel, hija de Et Baal, rey de los Sidonios, y fue a servir a Baal y lo adoró. (1 Reyes 16:31)
Así Jehú extirpó a Baal de Israel. (2 Reyes 10:28)
Despreciaste a la Roca que te engendró, Y olvidaste al Dios que te dio a luz. (Deuteronomio 32:18)
Porque reedificó los lugares altos que su padre Ezequías había destruido; levantó también altares a Baal e hizo una Asera (deidad femenina), como había hecho Acab, rey de Israel, y adoró a todo el ejército de los cielos y los sirvió. (2 Reyes 21:3)
Cuanto más los llamaban los profetas , Tanto más se alejaban de ellos; Seguían sacrificando a los Baales Y quemando incienso a los ídolos. (Oseas 11:2)
Cuídate de no olvidar al SEÑOR tu Dios dejando de guardar Sus mandamientos, Sus ordenanzas y Sus estatutos que yo te ordeno hoy; (Deuteronomio 8:11)
Así son las sendas de todos los que se olvidan de Dios. Así perecerá la esperanza del impío, (Job 8:13)
Se olvidaron de Dios su Salvador, Que había hecho grandes cosas en Egipto, (Salmos 106:21)
Pero ellos olvidaron al SEÑOR su Dios, y El los vendió en manos de Sísara, jefe del ejército de Hazor, en manos de los Filisteos y en manos del rey de Moab, los cuales pelearon contra ellos. (1 Samuel 12:9)
En ti se ha recibido soborno para derramar sangre; has tomado interés y usura, y has dañado a tus prójimos, extorsionándolos y de Mí te has olvidado," declara el Señor DIOS. (Ezequiel 22:12)
Pero pronto se olvidaron de Sus obras; No esperaron Su consejo. (Salmos 106:13)
¿Cómo puedes decir: 'No estoy manchada, No me he ido tras los Baales'? Mira tu proceder en el valle, Reconoce lo que has hecho. Eres una camella joven y liviana que enreda sus pasos, (Jeremías 2:23)
Porque según el número de tus ciudades son tus dioses, oh Judá, y según el número de las calles de Jerusalén, son los altares que has levantado a lo vergonzoso, altares para quemar incienso a Baal. (Jeremías 11:13)
Tomaste también tus bellas joyas de oro y de plata que Yo te había dado, y te hiciste imágenes de hombres para prostituirte con ellas. (Ezequiel 16:17)
Han llegado los días del castigo, Han llegado los días de la retribución; ¡Que lo sepa Israel! Un insensato es el profeta, Un loco el hombre inspirado, A causa de la magnitud de tu culpa, Y por tu mucha hostilidad. (Oseas 9:7)
Cuando comían sus pastos, se saciaron, Y al estar saciados, se ensoberbeció su corazón; Por tanto, se olvidaron de Mí. (Oseas 13:6)
Por tanto, así dice el SEÑOR, Dios de Israel, acerca de los pastores que apacientan a Mi pueblo: "Ustedes han dispersado Mis ovejas y las han ahuyentado, y no se han ocupado de ellas. Por eso Yo me encargaré de ustedes por la maldad de sus obras," declara el SEÑOR. (Jeremías 23:2)
Se han corrompido profundamente Como en los días de Guibeá; El se acordará de su iniquidad, Castigará sus pecados. (Oseas 9:9)
Porque te olvidaste del Dios de tu salvación Y no te acordaste de la Roca de tu refugio. Por tanto, siembras plantas deleitosas Y les injertas sarmientos de un dios extraño. (Isaías 17:10)
Aún más, mandaron a buscar hombres que vinieran de lejos, a quienes se les envió un mensajero, y vinieron. Para ellos te bañaste, te pintaste los ojos y te ataviaste con adornos. (Ezequiel 23:40)
Pues su madre se prostituyó; La que los concibió se deshonró, Porque dijo: 'Iré tras mis amantes, Que me dan mi pan y mi agua, Mi lana y mi lino, mi aceite y mi bebida.' (Oseas 2:5)
Pues Israel se ha olvidado de su Hacedor y ha edificado palacios, Y Judá ha multiplicado ciudades fortificadas; Pero Yo enviaré fuego a sus ciudades que consumirá sus fortalezas. (Oseas 8:14)
entonces ten cuidado, no sea que te olvides del SEÑOR que te sacó de la tierra de Egipto, de la casa de servidumbre (de esclavos). (Deuteronomio 6:12)
Entonces los Israelitas hicieron lo malo ante los ojos del SEÑOR y sirvieron (adoraron) a los Baales. (Jueces 2:11)
Y él respondió: "Yo no he perturbado a Israel, sino tú y la casa de tu padre, porque ustedes han abandonado los mandamientos del SEÑOR y han seguido a los baales. (1 Reyes 18:18)
¿Se olvida una virgen de sus adornos, O una novia de su atavío? Pues Mi pueblo Me ha olvidado Por innumerables días. (Jeremías 2:32)
Mi pueblo es destruido por falta de conocimiento. Por cuanto tú has rechazado el conocimiento, Yo también te rechazaré para que no seas Mi sacerdote. Como has olvidado la ley de tu Dios, Yo también Me olvidaré de tus hijos. (Oseas 4:6)
Ella seguirá a sus amantes, pero no los alcanzará; Los buscará, pero no los hallará. Entonces dirá: 'Iré y volveré a mi primer marido, Porque mejor me iba entonces que ahora.' (Oseas 2:7)
Cuando Efraín hablaba, reinaba el temor; Se había exaltado a sí mismo en Israel, Pero por causa de Baal pecó y murió. (Oseas 13:1)
Olvidaron Sus obras Y los milagros que les había mostrado. (Salmos 78:11)
Pues bien, Mi pueblo Me ha olvidado, Queman incienso a dioses vanos (a la vanidad), Y se han desviado de sus caminos, De las sendas antiguas, Para andar por senderos, No por calzada, (Jeremías 18:15)
Ofrecen sacrificios sobre las cumbres de los montes Y queman incienso sobre las colinas, Debajo de las encinas, los álamos y los terebintos, Porque su sombra es agradable. Por tanto, sus hijas se prostituyen, Y sus nueras cometen adulterio. (Oseas 4:13)