Nueva Biblia Latinoamericana
Tenía el aspecto de la visión que vi, como la visión que había visto cuando El vino a destruir la ciudad; y las visiones eran como la visión que yo había visto junto al río Quebar. Entonces me postré sobre mi rostro. (Ezequiel 43:3)
La gloria del SEÑOR entró en el templo por el camino de la puerta que da hacia el oriente. (Ezequiel 43:4)
Entonces el Espíritu me levantó y me llevó al atrio interior, y la gloria del SEÑOR llenó el templo. (Ezequiel 43:5)
Y oí a uno que me hablaba desde el templo, mientras el hombre estaba de pie junto a mí,
y me dijo: "Hijo de hombre, este es el lugar de Mi trono, el lugar de las plantas de Mis pies, donde habitaré entre los Israelitas para siempre. Y la casa de Israel no volverá a profanar Mi santo nombre, ni ellos ni sus reyes, con sus prostituciones y con los cadáveres de sus reyes cuando mueran, (Ezequiel 43:7)
poniendo su umbral junto a Mi umbral, y sus postes junto a Mis postes con sólo un muro entre ellos y Yo. Ellos han profanado Mi santo nombre con las abominaciones que han cometido; por eso los he consumido en Mi ira. (Ezequiel 43:8)
Que alejen ahora de Mí sus prostituciones y los cadáveres de sus reyes, y Yo habitaré entre ellos para siempre. (Ezequiel 43:9)

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Ezequiel 43:6 - Referencia Cruzada

Me llevó allá; y vi a un hombre cuyo aspecto era semejante al bronce, con un cordel de lino y una caña de medir (unos 3 m) en la mano, y estaba de pie en la puerta. (Ezequiel 40:3)
El SEÑOR llamó a Moisés y le habló desde la tienda de reunión: (Levítico 1:1)
Oí entonces una gran voz que desde el templo decía a los siete ángeles: "Vayan y derramen en la tierra las siete copas del furor de Dios." (Apocalipsis 16:1)
Voz de estruendo viene de la ciudad, una voz sale del templo: La voz del SEÑOR que da el pago a Sus enemigos. (Isaías 66:6)