Abrí, pues, mi boca, y El me dio a comer el rollo.
(Ezequiel 3:2)Entonces me dijo: "Hijo de hombre, alimenta tu estómago y llena tu cuerpo de este rollo que te doy." Y lo comí, y fue en mi boca dulce como la miel.
(Ezequiel 3:3)Me dijo además: "Hijo de hombre, ve a la casa de Israel y háblales con Mis palabras.
(Ezequiel 3:4)Porque no eres enviado a un pueblo de habla incomprensible y lengua difícil, sino a la casa de Israel.
Tampoco te envío a pueblos numerosos de habla incomprensible y lengua difícil cuyas palabras no puedas entender. Aunque si te enviara a ellos, ellos te escucharían.
(Ezequiel 3:6)Pero la casa de Israel no querrá escucharte, ya que no quieren escucharme a Mí. Ciertamente toda la casa de Israel es terca y de duro corazón.
(Ezequiel 3:7)Por eso he hecho tu rostro tan duro como sus rostros, y tu frente tan dura como sus frentes.
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Ezequiel 3:5 - Referencia Cruzada
No verás más al pueblo feroz, Pueblo de habla incomprensible, que nadie entiende, De lengua tartamuda, que nadie comprende.
(Isaías 33:19)Tampoco te envío a pueblos numerosos de habla incomprensible y lengua difícil cuyas palabras no puedas entender. Aunque si te enviara a ellos, ellos te escucharían.
(Ezequiel 3:6)El lo estableció por testimonio en José, Cuando salió sobre la tierra de Egipto. Un lenguaje que yo no conocía, oí:
(Salmos 81:5)En verdad, con tartamudez de labios Y en lengua extranjera, El hablará a este pueblo,
(Isaías 28:11)Levántate, ve a Nínive, la gran ciudad, y proclama contra ella, porque su maldad ha subido hasta Mí."
(Jonás 1:2)Te rescataré del pueblo Judío y de los Gentiles, a los cuales Yo te envío,
(Hechos 26:17)Levántate, ve a Nínive, la gran ciudad, y proclama en ella el mensaje que Yo te diré."
(Jonás 3:2)