Nueva Biblia Latinoamericana
Pero yo con voz de acción de gracias Te ofreceré sacrificios. Lo que prometí, pagaré. La salvación es del SEÑOR." (Jonás 2:9)
Entonces el SEÑOR dio orden al pez, y éste vomitó a Jonás en tierra firme. (Jonás 2:10)
La palabra del SEÑOR vino por segunda vez a Jonás: (Jonás 3:1)
Levántate, ve a Nínive, la gran ciudad, y proclama en ella el mensaje que Yo te diré."
Y Jonás se levantó y fue a Nínive conforme a la palabra del SEÑOR. Nínive era una ciudad muy grande, de un recorrido de tres días. (Jonás 3:3)
Entonces Jonás comenzó a recorrer la ciudad camino de un día, y proclamaba: "Dentro de cuarenta días Nínive será arrasada." (Jonás 3:4)
Entonces los habitantes de Nínive creyeron en Dios, y proclamaron ayuno y se vistieron de cilicio desde el mayor hasta el menor de ellos. (Jonás 3:5)

Otras publicaciones relacionadas con "Jonás 3:2":

Samuel Caraballo
Las consecuencias de nuestras decisiones y acciones
En este artículo, Samuel Caraballo nos habla sobre las consecuencias de nuestras decisiones y acciones, y cómo la historia de Jonás nos enseña acerca de la importancia de la obediencia y la responsabilidad personal en nuestra relación con Dios.


Valerie Gonzalez
Despierta y vete
Artículo sobre la importancia de despertar y vivir de acuerdo a la voluntad de Dios, cambiar nuestras prioridades y reconocer que Dios es el Dios de la tormenta. Se destaca la importancia de la oración y de estar dispuestos a desprendernos de lo que no es importante para lograr nuestro propósito y llevar la salvación a otros.


Jonás 3:2 - Referencia Cruzada

El extenderá Su mano contra el norte Y destruirá a Asiria, Y hará de Nínive una desolación, árida como el desierto. (Sofonías 2:13)
Después de esto Jesús lo halló en el templo y le dijo: "Mira, has sido sanado; no peques más, para que no te suceda algo peor." (Juan 5:14)
Por tanto, den frutos dignos de arrepentimiento; (Mateo 3:8)
Tú, pues, prepárate, Levántate y diles todo lo que Yo te mande. No temas ante ellos, No sea que Yo te infunda temor delante de ellos. (Jeremías 1:17)
Levántate, ve a Nínive, la gran ciudad, y proclama contra ella, porque su maldad ha subido hasta Mí." (Jonás 1:2)
Les hablarás Mis palabras, escuchen o dejen de escuchar, porque son rebeldes. (Ezequiel 2:7)
Entonces dijo así el SEÑOR: "Si vuelves, Yo te restauraré, En Mi presencia estarás; Si apartas lo precioso de lo vil, Serás Mi portavoz. Que se vuelvan ellos a ti, Pero tú no te vuelvas a ellos. (Jeremías 15:19)
Hijo de hombre, te he puesto por centinela de la casa de Israel. Cuando oigas la palabra de Mi boca, adviérteles de Mi parte. (Ezequiel 3:17)
Y Jonás se levantó y fue a Nínive conforme a la palabra del SEÑOR. Nínive era una ciudad muy grande, de un recorrido de tres días. (Jonás 3:3)